Tener dos embarazos y partos muy seguidos representa un alto costo para la salud del bebé y de la mamá.
Muchas veces hemos escuchado a parejas que aseguran estar tan felices con su bebé, que apenas nace, quieren buscar otro inmediatamente para multiplicar la maravillosa experiencia de ser padres.
Sin embargo, es muy probable que un embarazo y un parto inmediato ya no sean tan satisfactorios, pues existen varios riesgos que surgen por no esperar el tiempo que el cuerpo de la mujer necesita para recuperarse y brindarle un ‘espacio’ adecuado a la nueva criatura.
El peligro de no esperar lo suficiente
Existen áreas que se pueden ver afectadas cuando la mujer queda embarazada rápidamente después de haber dado a luz. Agustín Conde-Agudelo, investigador asociado del Departamento de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario Fundación Santa Fe de Bogotá, explica las tres situaciones de riesgo:Complicaciones en la madre: “si la mujer queda en embarazo dentro de los seis primeros meses después del nacimiento del bebé, aumenta el riesgo de muerte materna, hemorragias por desprendimiento prematuro de la placenta, anemia, placenta previa, ruptura de membranas e infecciones”, aclara el especialista.Complicaciones en el bebé: Conde-Agudelo asegura que para el bienestar del niño deben esperarse por lo menos 18 meses, porque existe el riesgo de que el bebé nazca prematuro, con bajo peso, o pequeño de acuerdo con su edad gestacional. Complicaciones después del nacimiento: cuando no se ha esperado lo suficiente, aumentan las probabilidades de que el menor muera, peligro que se corre hasta que cumpla los 5 años.
Estos resultados fueron observados en varias investigaciones realizadas por este experto junto con las especialistas Anyeli Rosas y Ana Cecilia Kafury. Los estudios se publicaron en las revistas científicas The Journal of the American Medical Association (JAMA), The Lancet y en American Journal of Obstetrics and Gynecology.
De acuerdo con los resultados obtenidos por estos médicos colombianos, la Organización Mundial de la Salud adoptará medidas para recomendar a las madres que no se embaracen antes de dos años, ni después de cinco, debido a que un largo periodo también puede considerarse un riesgo.
Esperar demasiado
Tener un bebé después de 59 meses (cinco años) de haber pasado por un parto o una cesárea aumenta las posibilidades de sufrir preeclampsia, hipertensión durante el embarazo y complicaciones en el trabajo de parto, que pueden aumentar la tasa de cesáreas.
Mientras tanto, el bebé que nace después de un periodo prolongado de espera tiene los mismos riesgos que cuando se embaraza rápidamente, es decir, parto prematuro, bajo peso, o pequeño según con su edad gestacional.
Si una mujer se asesora por un equipo de especialistas, su gestación puede llegar a buen término, con los cuidados necesarios. “Un control prenatal más riguroso, donde la mujer sea educada acerca de los primeros signos y síntomas de estas complicaciones, así como algunas medidas preventivas, pueden hacer que su embarazo sea completamente normal a pesar de haberse embarazado antes de dos años o después de cinco años de su parto anterior”, asegura Conde-Agudelo.
Una barrera
Es cierto que amamantar actúa como anticonceptivo y se conoce como el Método de la Amenorrea de la Lactancia (LAM, por sus siglas en inglés). Sin embargo, muchas mujeres confían demasiado en esta circunstancia y vuelven a quedar embarazadas durante este periodo, sin saber que deben cumplirse ciertas características para que este método natural sea más confiable:No se aplica cuando el bebé, además de leche materna, está tomando fórmulas artificiales.Si se presentó la menstruación después del parto es un signo indirecto de que la mujer se encuentra ovulando.Si está lactando exclusivamente y no hubo menstruación, la protección puede ser del 90 por ciento. Aún así, averigüe los métodos que puede usar.
Por Juliana Rojas
Redactora de ABC del bebé.