En la mañana de este martes, la Policía Metropolitana de Bogotá informó que fueron capturados cuatro hombres de nacionalidad extranjera, quienes hacen parte del grupo de delincuencia común organizada denominado ‘los Satanás’, dedicados a la extorsión en las localidades de Usme y Bosa.
Según informaron las autoridades, esta banda realizaba cobros extorsivos de altas sumas de dinero, a través de amenazas a los habitantes de las localidades de Usme y Bosa.
Durante las diligencias de registro y allanamiento fueron encontrados panfletos, los cuales eran utilizados para realizar videos extorsivos, de igual forma cuadernos en los que registraban los cobros, con los nombres de sus víctimas.
Si los comerciantes no pagaban, esto les generaba afectaciones a sus establecimientos y a la integridad de los dueños de los negocios y a los empleados.
Entre los cuatro presuntos delincuentes, de nacionalidad extranjera, se encuentra alias ‘Roniel’, quien habría asumido como encargado de las extorsiones después de la captura de alias ‘Satanás’. Estas personas presentan registros en el Sistema Penal Oral Acusatorio por los delitos de extorsión, receptación, homicidio, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones.
De acuerdo con las autoridades, en el trascurso de las diligencias a las viviendas fueron incautadas dos granadas de fragmentación, dos granadas de aturdimiento, una granada de humo, un arma de fuego tipo pistola, 12 cartuchos nueve milímetros, un proveedor para pistola, ocho teléfonos celulares los cuales eran utilizados para enviar mensajes amenazantes exigiendo altas sumas de dinero y 15 panfletos con los cuales intimidaban a sus víctimas, alusivos a la estructura ‘Satanás’.
Con las investigaciones se pudo establecer que una motocicleta que se encontró en los allanamientos, con una granada de fragmentación, estarían relacionadas con el atentado dirigido a un reconocido hospedaje de la localidad de Tunjuelito, así mismo, este automotor, era utilizado para la comisión de hechos relacionados con homicidios por el no pago de las extorsiones.
REDACCIÓN BOGOTÁ