Lancheros de Urabá reinician actividades tras conversaciones con las autoridades
Desde mañana a las 6:00 a. m. vuelven a prender motores para transportar a los migrantes.
La travesía a través del Darién es una odisea desgarradora para los migrantes que buscan una vida mejor en los Estados Unidos. Foto: Jaiver Nieto / CEET
El represamiento de migrantes que desde hace una semana se presenta en Turbo y Necoclí tras la captura de dos lancheros por el presunto delito de tráfico de migrantes y que sus compañeros decidieran apagar los motores por "falta de garantías" para ejercer su trabajo, fue superado.
Así quedó acordado en la tarde de este jueves, 29 de febrero, después de realizada una mesa de diálogo entre lancheros, autoridades civiles y militares, donde se definió que desde este viernes, 1 de marzo, a las 6 de la mañana, se reanudan las actividades en ambos muelles.
La decisión fue confirmada por el personero de Turbo, Wilfren Córdoba, quien explicó que las empresas de transporte marítimo tomaron la decisión de regresar a las actividades que venían desarrollando.
“Efectivamente manifestaron su intención de continuar prestando el servicio conforme lo venían prestando. Con el cumplimiento de los reglamentos para ese caso”, manifestó Córdoba.
La travesía a través del Darién es una odisea desgarradora para los migrantes que buscan una vida mejor en los Estados Unidos. Foto:Jaiver Nieto / CEET
Así las cosas, los migrantes que podrán salir de Turbo y Necoclí hacia Acandí y continuar su tránsito hacia el Darién, serán aquellos que cumplan con el registro en la aplicación 'Tránsito Seguro'.
Esta App está reglamentada por el decreto 1720 de 2023 de Migración Colombia y se implementó para regular el tránsito migratorio por el país. Es obligatorio para ciudadanos de 30 nacionalidades, entre las que se encuentran Cuba y Venezuela.
Hay que recordar que recientemente la Defensoría del Pueblo había emitido una alerta sobre el riesgo de represamiento a miles de personas que buscan cruzar el tapón del Darién.
La entidad informó que la situación podría colapsar la capacidad de atención que tienen Turbo y Necoclí, en el Urabá antioqueño, para recibir a los miles de personas que diariamente llegan en tránsito a esta región del país. Según cuentas de las autoridades, todos los días hay un flujo de 1.000 a 2.000 migrantes en la región.
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