El programa corazón ámbar cuenta con una serie de características que ayudan a los pacientes que se enfrentan a enfermedades amenazantes para la vida, que debilitan y provocan múltiples complicaciones biológicas, afectivas y sociofamiliares que generan una situación de sufrimiento.
Dentro de las características de nuestro programa, resalto las siguientes:
- Proporcionamos el alivio del dolor y de otros síntomas que producen sufrimiento.
- Ofrecemos apoyo psicosocial y espiritual a los pacientes y familiares durante la enfermedad y el duelo.
- No nos proponemos a acelerar el proceso de morir ni retrasarlo.
Actualmente es evidente que, con el aumento de las enfermedades crónico-degenerativas, la intención de prolongación de la supervivencia también va en crecimiento, debido a las nuevas terapias y técnicas de soporte; pero cuando los tratamientos curativos han llegado a su fin y ya no cumplen con su cometido, nos llevan a plantearnos interrogantes sobre los cuidados que deben prestar los profesionales en salud, haciendo de los cuidados paliativos una necesidad de salud pública.
“No se trata de vivir más, sino de vivir bien”
El principal objetivo que debemos plantearnos es conseguir la mejor calidad de vida para el paciente y su familia; es así, como entran en escena y con fuerza, los cuidados paliativos, cuya finalidad no es ni acortar, ni alargar la vida, sino, lograr la mejora de la calidad de vida del paciente y todo su entorno.
IPS Cuidado Seguro En Casa Foto:
Tan importante como prevenir y curar enfermedades, lo es ayudar a los seres humanos a morir dignamente; y es aquí donde el rol que tiene la enfermería, aumenta su importancia en los cuidados paliativos, brindando siempre un abordaje integral e interdisciplinar, para lograr esa calidad de vida tan anhelada de los pacientes y su familia.
Entre las muchas funciones que desempeña un jefe de enfermería, en el abordaje y acompañamiento de los pacientes paliativos, podemos destacar los siguientes:
· Hacer una valoración integral de las necesidades del paciente, su familia y/o cuidador, para planificar las intervenciones y solucionar o mejorar los problemas detectados.
· Prestar los cuidados de enfermería necesarios para lograr el mayor equilibrio físico (alivio de síntomas) y mental, hasta alcanzar la calidad de vida del enfermo y su familia.
· Ayudar a prevenir y sobrellevar los momentos de crisis.
· Dedicar tiempo, ofrecer apoyo y compañía, siendo respetuosos y comprensivos. En el saber escuchar, se puede conocer la actitud del paciente ante la enfermedad.
· Analizar el proceso de atención del cuidador principal o familiar, para detectar el riesgo de cansancio, en su rol del cuidador.
· Educar al paciente, a su familia y a su cuidador, en el manejo integral de las necesidades que surgen en el curso de la enfermedad.
· Educar sobre el programa de cuidados paliativos y los servicios que brindamos.
Para concluir, la tendencia actual lleva a los pacientes con enfermedades incurables, a pasar los últimos días de vida en su domicilio, en la privacidad de su hogar y rodeado de su entorno familiar; de ahí la gran importancia del papel de enfermería, para que los pacientes y familiares se sientan cuidados, seguros y acompañándolos en el atardecer de su vida.
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