Si Diana de Gales y el príncipe Carlos de Inglaterra siguieran casados, habrían cumplido 40 años de casados el pasado 29 de julio de 1981.
La boda de la joven, de 20 años, en la catedral de San Pablo de Londres, fue vista por más de 750 millones de personas en el mundo, gracias a los medios de comunicación.
Del matrimonio nacieron Guillermo y Enrique de Sussex, quienes eran el segundo y el tercero en la línea de sucesión al trono, en su momento.
Como dato curioso, hace unos años se supo que la princesa Diana de Gales intentaba quedarse embarazada de su tercer hijo en la misma época en que su esposo, el príncipe Carlos, afirma que su matrimonio estaba roto, según informó el periódico Daily Mail .
El diario citó a amigos de la princesa, que afirmaban que aunque Diana nunca habló en público de este asunto.
Diana insistía que en la época que su esposo afirmó, en el programa de televisión en el que reconoció su adulterio, que este se produjo cuando su matrimonio estaba irremediablemente acabado, ambos intentaban tener un nuevo hijo, con la esperanza de que fuese una niña.
Aunque en el programa de televisión el príncipe de Gales no precisó la fecha de su adulterio, en una conferencia de prensa posterior, concedida por Dimbley, este señaló que Carlos le había dicho en privado que el matrimonio había muerto en la segunda mitad de la década 1980 , fijando el periodista la fecha en 1986, cinco años después de la boda.
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