El
Servicio de Inmigración y Aduana de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés)
continúa con sus redadas por orden del presidente Donald Trump. Muchas comunidades latinas de distintas ciudades son sorprendidas por operativos sorpresa que terminan con detenciones de migrantes ilegales y algunos con estatus en suspenso. En este caso, desde un restaurante denunciaron las condiciones de un operativo.
El viernes pasado,
ICE entró por la fuerza a un restaurante mexicano llamado “El Potro”, ubicado en Kansas City, Misuri. A
pesar de no contar con orden judicial, algo fundamental e indispensable para ingresar a una propiedad privada,
lo hicieron y detuvieron a una docena de migrantes que trabajaban en el restaurante.
Según relató una de las implicadas a KSHB 41, el hecho ocurrió minutos antes de abrir el local. El dueño fue el que les abrió la puerta, ya que alegaron que tenían una orden de arresto para un individuo. “Reunieron a todos. Estaban en cada puerta. Había como 15 de ellos y empezaron a acorralar a todos y a pedirles que les tomaran las huellas digitales”, relató Yadira De La Torre, gerente general e hija de los dueños.
Luego, comenzaron a llevárselos esposados a las camionetas de ICE. 12 personas fueron llevadas del lugar y no está claro cuál será su futuro. La gerenta aseguró que los empleados involucrados no tienen ninguna condena penal y que son empleados desde hace mucho tiempo.
El sheriff local dijo que no sabía nada sobre la redada de ICE en Kansas City
Las detenciones derivaron en diversas manifestaciones contra la istración de Trump y lo ocurrido en el restaurante. Según informó el medio local, aún se desconoce el paradero de los 12 empleados y el destino que tendrán. Sin embargo, el sheriff local, Will Akin, dijo que los oficiales estaban llevando a cabo una operación rutinaria.
Según él, desconocía la operación de los agentes federales y la redada. Su conocimiento llegaba a una operación de cumplimiento de la ley para una persona buscada por una orden judicial por un delito sexual infantil.