Las estafas en Estados Unidos pueden aparecer a través de cualquier medio, y más aún en la actualidad, con una innumerable cantidad de herramientas que pueden servir para falsificar documentos, perfiles, mensajes, identidades, archivos, entre otros, para engañar a las víctimas en cuestión.
Eso le ocurrió a una pareja estadounidense que quiso comprar una casa en San Anonio, Texas. Laurie y Rich Ramelow perdieron nada menos que US$63.000 en una estafa: según le contaron a Business Insider, alguien se hizo pasar por el vendedor de la propiedad y les pidió que depositen en su cuenta el dinero del depósito de garantía, consiguiendo engañarlos en su totalidad. Después de esto, la pareja tuvo que gastar todos sus ahorros para pagar nuevamente la propiedad.
Laurie, de 55 años, contó que una noche transfirió todo el dinero y al otro día recibió un llamado de la oficial inmobiliaria preguntándole por qué todavía no había enviado el pago, por lo que fue en ese momento en el que se dio cuenta que había sido estafada. "El estafador conocía la dirección y todas las partes involucradas", aseguró la víctima.
La razón por la que los Ramelow se querían mudar a San Antonio era para estar más cerca de su hija, y ese deseo fue más fuerte que el dinero perdido: a pesar de haber sido estafados, gastaron gran parte del dinero que guardaban para el futuro para comprar la casa de todas maneras.
Parte de esos US$63.000 habían sido prestados por sus padres (unos US$20.000), y, según mencionan, esa parte sí pudo ser recuperada mientras trabajan en ello junto a la empresa de protección contra fraudes electrónicos CertifID y el Servicio Secreto para recuperar los fondos, pero los US$43.000 restantes todavía siguen perdidos.
Imagen panorámica de San Antonio, Texas Foto:iStock
La principal actitud para detectar una estafa en Estados Unidos
Lisa Plaggemier, directora ejecutiva de la Alianza Nacional de Ciberseguridad, también conversó con Business Insider, y allí reveló una característica muy común en este tipo de estafas por correo, tal como la que sufrieron los Ramelow: en la mayoría de los casos, los estafadores apresuran a las víctimas para que transfieran el dinero lo antes posible.
"Los signos reveladores son que lenguaje está un poco fuera de lugar y esa sensación de urgencia”, aseguró, así como también es muy influyente la detección de pequeños errores gramaticales, a los que Laurie no les prestó demasiada atención por no conocer en profundidad al agente inmobiliario.
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