Estaba exaltado, con rabia y descontento porque el compañero sentimental de su cuñada estaba presente en su casa, pues no simpatizaba con él. Gritó y agredió verbalmente a su pareja. Ese fue el detonante; el motivo que lo llevó a darse cuenta de que necesitaba apoyo.
Alejandro Pulgar, es un bogotano de 39 años que ha trabajado como docente por casi la mitad de su vida. Él, al igual que muchos otros hombres acudió a la Línea Calma, un programa que actualmente realiza su relanzamiento y, que en su fase piloto atendió telefónicamente a 1.139 s y brindó acompañamiento psicoeducativo a 131 hombres entre diciembre de 2020 y junio de 2021.
Decidió llamar por su propia cuenta a la línea de atención, después de tres meses de discusión con su esposa. Recordó un anunció en redes sociales, que le pareció una ‘iniciativa curiosa’, así que tomó el teléfono, marcó el número y accedió a los términos que le dieron para ser atendido. “Me di cuenta de que era necesario escudriñar por qué razón yo actuaba de la misma manera siempre”, expresa.
El proceso de acompañamiento inició en febrero de 2021, y duró dos meses. Consistió en el monitoreo de su estado emocional a través de llamadas telefónicas periódicas y encuentros virtuales cara a cara con profesionales y psicólogos que lo ayudaron a analizar su comportamiento en diferentes fases: detonante, explosión de emociones y luna de miel, en la cual se evidencian los episodios de reconciliación intrafamiliar, pero que no reconocen que hay un problema de fondo que afecta la relación.
“Antiguamente sin la existencia de la Línea, yo pensaba que eso era algo normal y que la forma en como agredía verbalmente a mi pareja era parte de un libreto”, dice Alejandro con un tono de arrepentimiento en su voz.
La prevención de casos de violencia de género y la resolución de situaciones de conflicto emocional en hombres mayores de 18 años, son los principales objetivos de la Línea Calma, a la que puede acceder a través del número de teléfono: 018000423614 en Bogotá.
Con su relanzamiento ahora ofrecerá atención presencial, círculos para encuentros de hombres y extensión en sus horarios de lunes a viernes (8 p. m. a 10:30 p. m.); sábados (2 p. m. a 10:30 p. m.) y domingos (2 a 10:30 p. m.).
Nicolás Montero, secretario de Cultura, Recreación y Deporte, afirmó que los registros de las llamadas telefónicas y los procesos de acompañamiento han generado resultados satisfactorios. “Nos han revelado que los hombres se sienten mejor, se expresan mejor e incluso han logrado prevenir situaciones de violencias, gracias a la orientación de la Línea Calma. Nuestro propósito es seguir multiplicando este mensaje”, precisó.
Alejandro concuerda con esta finalidad y realiza un llamado para que los hombres ‘no tengan pena’ y se comprometan con un ejercicio permanente de cambio para romper con el círculo de violencia. Y agrega: “Es importante que apareciera la Línea Calma para revaluar la forma de como yo estaba dando a conocer mis emociones, mis posturas frente a las cosas, porque no debía de hacerlo de una forma violenta. Eso es fundamental”.
REDACCIÓN BOGOTÁ