La historia de la mujer que vendía niñas al ex-para pedófilo Hernán Giraldo

En la cárcel permanece en estos momentos Noralba Vasco, la mujer que está siendo procesada por la justicia por haber participado en las actividades de tipo sexual contra varias menores de edad, que fueron víctimas del exjefe paramilitar Hernán Giraldo Serna.

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La historia de las violaciones con menores que realizó el ‘taladro’,  ‘El Patrón’, ‘El Viejo’, o ‘El Señor de la Sierra’ como también se le llamó, por el poder militar y político que tuvo en el Magdalena, fue recogida y documentada por la investigadora samaria Norma Vera Salazar, desde el 2002, quien asegura que Giraldo logró abusar de unas 200 niñas menores de 14 años, en un período de 15 a 20 años.

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Esta dolorosa historia se sigue escribiendo. El nuevo capítulo está en manos de una  fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos, quien  obtuvo declaraciones y otros elementos de prueba que dan cuenta de la posible participación de Noralba Vasco en esta cadena de abusos sexuales contra menores de edad.

Vasco fue la empleada, cocinera, confidente, amiga y la encargada de custodiar el dinero del entonces cabecilla del mal llamado Bloque Resistencia Tayrona de las extintas AUC, que tenía presencia en la Sierra Nevada de Santa Marta.

De acuerdo con la Fiscalía, Vasco al parecer, captó, trasladó y acogió, por lo menos, cuatro niñas que fueron sometidas a distintos vejámenes entre 2005 y 2006.

Esta persona, presuntamente, ubicó a las menores de edad, de 11 y 12 años, en corregimientos de Santa Marta (Magdalena) y las llevó a las fincas que frecuentaba Giraldo Serna antes de su desmovilización, en febrero de 2006.

La investigación da cuenta de que las habría persuadido para que accedieran a los propósitos sexuales, y les proveía ropa y otros elementos para que permanecieran a su lado.

De igual manera, la Fiscalía constató que los hechos se extendieron mientras el exjefe paramilitar estuvo privado de la libertad luego del proceso de dejación de armas. Luego fue extraditado a los Estados Unidos.

Vasco, supuestamente, llevó a las víctimas a los establecimientos carcelarios y gestionó las entradas para que continuaran los encuentros sexuales.

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Los registros de las cárceles de La Ceja e Itagüí (Antioquia), y La Modelo de Barranquilla (Atlántico), donde estuvo Giraldo Serna, evidencian múltiples ingresos de las niñas.

La hoy procesada, al parecer, presentó documentos en los que se hacía pasar como la mamá o indicaba que eran ahijadas del denominado ‘Señor de la Sierra’, entre otras maniobras.

Para la Fiscalía, Noralba Vasco, presuntamente, sacó provecho económico de las agresiones sexuales contra las menores de edad e incurrió en conductas de violencia basadas en género. En ese sentido, fue acusada por los delitos de trata de personas agravada y explotación sexual agravada.

“Esta mujer permanece privada de la libertad desde mayo de 2021, cuando fue capturada y se le resolvió la situación jurídica en atención a los parámetros definidos en la Ley 600 de 2000 (anterior Sistema Penal)”, puntualiza en el comunicado de la Fiscalía.

Giraldo fue deportado de los Estados Unidos el lunes 25 de enero desde Estados Unidos, donde pagó una condena de 12 años por narcotráfico.  Ahora permanece preso en la cárcel de máxima seguridad La Paz, en Itagüí, Antioquia, donde  debe responder por delitos relacionados con masacres, homicidios selectivos, desapariciones forzadas, desplazamientos, secuestros, amenazas y s carnales violentos contra personas protegidas.