Barranquilla: muere bebé wayuu que había sido remitido con desnutrición desde Uribia

Una profunda tristeza se ha apoderado de la comunidad tras la lamentable muerte de un bebé wayuu de tan solo 45 días de nacido en Barranquilla.

El pequeño, perteneciente a la etnia wayuu y originario del municipio de Uribia en La Guajira, falleció en una clínica de la capital del Atlántico debido a complicaciones derivadas de su estado de aparente desnutrición.

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Según la ONG Derechos Humanos Nación Wayuu, desde La Guajira, el bebé había sido trasladado a Barranquilla el 13 de septiembre desde su ranchería en Uribia, ya que en su lugar de origen no había unidad especializada para la atención médica de un recién nacido de tan corta edad.

La falta de infraestructura y recursos médicos en las zonas rurales de La Guajira ha sido un problema persistente, especialmente para las comunidades indígenas.

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La situación del bebé se complicó aún más debido a una cardiopatía que se desarrolló en asociación con su cuadro de desnutrición, lo que finalmente llevó a su trágico fallecimiento. El cuerpo del bebé fue trasladado de regreso a La Guajira en una ardua labor emprendida por la ONG Derechos Humanos Nación Wayuu.

José Silva, miembro de la ONG, expresó su tristeza por la muerte del bebé y protestó por la falta de apoyo y atención adecuada que reciben las comunidades indígenas, particularmente los wayuu. "Desafortunadamente falleció, nada pudieron hacer los médicos; pero lo triste y lo que se denuncia es el poco acompañamiento que están brindando las diferentes EPS a la población indígena wayuu que tienen un enfoque diferencial, deben tener un trato diferencial", afirmó Silva.

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El caso del bebé wayuu es solo uno de los muchos incidentes que han afectado a esta comunidad en La Guajira. La ONG informó que más de 50 niños han perdido la vida debido a la desnutrición en la región en lo que va del año 2023, lo que resalta la urgente necesidad de tomar medidas efectivas para abordar este grave problema de salud pública.

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La comunidad y las organizaciones de derechos humanos están instando a las autoridades a tomar medidas concretas para garantizar que los recursos y el apoyo adecuados lleguen a las áreas más necesitadas de La Guajira y que se brinde una atención médica oportuna y de calidad a los niños en riesgo. La triste historia de madres wayuu que lloran la pérdida de sus hijos lejos de sus hogares ancestrales debe cambiar, y es responsabilidad de todos trabajar juntos para lograrlo.

Redacción Caribe