Playas de Santa Verónica exigen permisos para ‘paseos de olla'

A partir de este fin de semana los denominados ‘paseos de olla’ que llegan a las playas de Santa Verónica, en el municipio de Juan de Acosta (Atlántico), deberán cumplir con una serie de requisitos cuyos trámites podrían tardar hasta ocho días.

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La medida fue anunciada este jueves por el alcalde de Juan de Acosta, Carlos Higgins Villanueva, ante los hechos de alteración del orden público, que se registraron el fin de semana anterior como consecuencia de una pelea entre personas que llegaron en uno de los denominados ‘paseos de olla’.

Para evitar que estos episodios se vuelvan a repetir, explica Higgins, se tomaron una serie de medidas durante un consejo de seguridad, en el que participaron los 22 operadores turísticos del balneario, y las autoridades municipales.

Los llamados 'paseos de olla', son las excursiones que se organizan en barrios populares de Barranquilla y municipios vecinos, utilizando buses de servicio urbano. En muchos casos llevan la comida en grandes ollas, bebida y hasta la música,  situación que genera malestar en los establecimientos comerciales y vendedores que trabajan en las playas, ya que el consumo de este tipo de turismo es mínimo, pero el sucio y el ruido que generan es alto.  

El mandatario anunció que los paseos que viene, en especial de Barranquilla, en buses y deseen ingresar a las playas del municipio deberán solicitar un permiso con ocho días de anticipación, en el que debe dejar claro quién es la persona responsable, la cual debe firmar unos compromisos en caso que se presenten problemas que atenten contra la tranquilidad o seguridad de los visitantes al balneario.

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Esta solicitud la pueden hacer a través de la Secretarias del Interior o Turismo de la Alcaldía de Juan de Acosta, o la Inspección de Policía. El trámite puede ser virtual o presencial.

“Buscamos mantener el orden, la seguridad y convivencia de turistas y de nuestros habitantes”, dijo el alcalde Higgins, quien dijo que se tiene un manual de convivencia para el uso de estas playas.

Sobre la batalla campal que se registró la tarde del domingo en Santa Verónica, el alcalde informó que fueron personas que llegaron desde Barranquilla y trasladaron una fiesta privada hasta las playas.

La ingesta de licor de algunos visitantes provocó una pelea  que fue grabada con cámaras de celulares.  Las imágenes fueron subidas a las redes sociales, impactando de manera negativa la imagen del balneario.

“No vamos a permitir que personas que vienen en esos buses, sin ningún tipo de control, afecten la tranquilidad de nuestras playas”, advirtió el mandatario.

Sobre a pelea el empresario turístico, Silvio Charris, aseguró que esto impactó negativamente al sector del turismo del balneario.

“Esa fue una pelea que verdaderamente tuvo dos impactos: un impacto económico, que fue la fuga de las cuentas de los restaurantes que estaban en el entorno donde ocurrió la pelea, y el impacto de imagen que proyectó negativamente a Santa Verónica”, dijo el hombre.

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Higgins dijo que a las playas de Santa Verónica llegan los fines de semana un promedio de 40 buses, que movilizan en promedio 800 a 1.000 personas.

La Policía de Tránsito, los bomberos, la Defensa Civil y los salvavidas de las playas de Juan de Acosta también estarán atentos a la llegada de estos paseos y que cumplan los controles exigidos.

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