Presidente de SuperGiros reabre puntos en el Caribe cerrados por amenazas del Clan del Golfo

El presidente de SuperGIROS, Edgar Páez, lideró este viernes la reapertura de varios locales de la compañía que permanecían cerrados desde hace 26 días por amenazas del Ejército Gaitanista de Colombia (Clan del Golfo).

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Acompañado por un nutrido grupo de colaboradores, Páez visitó puntos estratégicos en Barranquilla y Cartagena, donde se reunió con colocadoras y clientes que regresaron paulatinamente a los locales. Durante su recorrido, el presidente de la red de servicios más grande del país se mostró optimista y envió un mensaje de esperanza a su equipo y a los s.

“Vamos a pasar una Navidad llena de esperanza y positivismo”, afirmó Páez, rodeado de trabajadoras que recibieron con entusiasmo su visita. El directivo destacó el compromiso de los colaboradores, quienes han enfrentado semanas de incertidumbre ante el asedio de hombres armados que obligaron al cierre de más de 3.000 puntos en cinco departamentos del Caribe.

En cada punto visitado, Páez conversó directamente con las trabajadoras, brindándoles palabras de aliento y reconociendo su fortaleza. Además, invitó a los clientes a regresar a los locales y continuar utilizando los servicios que SuperGiros ofrece. "Aquí estamos y aquí nos quedamos" dijo .

“Vamos a terminar este año haciendo más grande a SuperGiros porque es el trabajo de todos nosotros. Entonces, los invito a que abran los puntos que faltan. ¡Vamos para adelante!”, expresó Páez con entusiasmo, mientras las colocadoras aplaudían y se sumaban a su mensaje.

SumerGiros, con una red que supera los 30.000 puntos en todo el país, es esencial para la economía de muchas comunidades. 

En sus locales se realizan giros, recargas telefónicas, pagos de servicios públicos y aportes gubernamentales, además de ofrecer servicios relacionados con la suerte y el azar. La compañía se ha consolidado como un puente para millones de colombianos que confían en sus servicios diariamente.

Desde el 4 de noviembre, la operación de SuperGIROS en el Caribe se vio afectada por amenazas directas del Clan del Golfo, grupo armado que ordenó el cierre de puntos en Atlántico, Bolívar, Sucre, Magdalena y Córdoba. Estas acciones intimidatorias no solo impactaron a la empresa, sino también a miles de s que dependen de los servicios que presta la red.

La reapertura de los locales marca un hito en el proceso de recuperación y normalización de la operación en la región. Según Páez, este gesto busca enviar un mensaje claro: “SuperGIROS está acá, se va a quedar acá y está en el futuro de todos”.

De acuerdo con las autoridades, detrás de estas intimidaciones está uno de los principales cabecillas del ‘clan del Golfo’ cuyo nombre apareció en la resolución 279 de 2024, del 22 de julio, con la que el Gobierno reconoció a seis de ese grupo armado para un eventual espacio de conversación sociojurídico para fijar los términos del sometimiento de la organización criminal.

Se trata de José Miguel Demoya Hernández, alias Chirimoya, quien nació en Ayapel, Córdoba, y es desmovilizado del Bloque Mineros de la Auc. A este hombre se le señala de ser el comandante del Bloque Arístides Mesa Páez, que además de tener presencia en el Urabá antioqueño, también tiene sus tentáculos en Atlántico, Sucre, y Bolívar.

Este hombre tiene una trayectoria criminal de 20 años y lo señalan de “coordinar y ordenar homicidios selectivos, extorsiones, desplazamientos forzados, narcotráfico y atentados contra de la fuerza pública”.

Sus inicios se dieron en el bloque Calima (Auc) en el 2004 como integrante y hombre de confianza de los abatidos alias Galivan, cabecillas del ‘clan del Golfo’. Asimismo, ‘Chirimoya’ sería el responsable (actor intelectual) de los diferentes homicidios generados por el ‘clan del Golfo’ en la costa Caribe, además, está liderando las diferentes confrontaciones a fin de apoderarse de las economías criminales.

“Esta persona estaría dinamizando las actividades de extorsión coaccionando a establecimientos de SuperGiros mediante hechos de violencia e intimidación para el cierre temporal de locales, con el fin de establecer acuerdos económicos mediante cuantías para brindar protección”, señalaron fuentes de inteligencia a EL TIEMPO

El ‘clan del Golfo’, en el último año, logró un gran avance territorial y militar, convirtiéndose en la estructura armada ilegal con mayor presencia y poder en el país.

 A julio de este año, el ‘clan del Golfo’ estaba conformado por seis bloques, 32 frentes, dos comisiones o compañías móviles, 2.499 personas armadas, 4.563 integrantes del denominado componente criminal focalizado o redes de apoyo. Y tienen presencia en 16 departamentos y 238 municipios.

El presidente de la compañía aprovechó la jornada para reiterar su llamado a las instituciones gubernamentales, solicitando su apoyo para garantizar la seguridad de los colaboradores y de los puntos de servicio. 

“Este gesto empresarial es un mensaje resiliente que refleja el compromiso de SuperGiros con el desarrollo del país”, afirmó.

Con más de 70.000 colaboradores a nivel nacional, SuperGiros no solo es una red de servicios financieros y sociales, sino también un motor de empleo y desarrollo económico. 

La reapertura de los puntos en el Caribe no solo devuelve la normalidad a miles de familias, sino que también representa un acto de resistencia frente a las amenazas que buscan desestabilizar la región.

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La jornada concluyó con un compromiso renovado por parte de los colaboradores y directivos de SuperGiros. Páez enfatizó la importancia de mantener la fe y la esperanza en un futuro promisorio para la compañía y el país.

“Vamos a seguir creciendo y fortaleciendo esta red que conecta a Colombia. Esta es nuestra misión y nuestro compromiso con todos los colombianos”, concluyó Pérez.