En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Antioquia busca enviar hipopótamos de Hacienda Nápoles a otros países
Este año puede ser trasladado el primer mamífero a un zoológico de Latinoamérica.
Según Conare, la hacienda Nápoles solo cuenta con un hipopótamo hembra, llamada Vanessa. Los demás, que habitan en el lago, hacen parte de la problemática de la región Foto: Guillermo Ossa
En diciembre del año pasado, los habitantes de Doradal, en el Magdalena Medio antioqueño, se sorprendieron al ver que un hipopótamo enorme caminaba por una de las calles del municipio. El lomo del animal brillaba por el reflejo del alumbrado público, mientras deambulaba apacible por entre los carros que estaban parqueados.
Conscientes de la peligrosidad que estos animales representan para los habitantes de la región, desde hace unos años se vienen tomando medidas para frenar su reproducción y evitar que estos transiten por las calles del pueblo. Cornare (Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare) ha venido desarrollando estrategias en este sentido. David Echeverry, biólogo de esa corporación, explica que desde hace varios años han trabajado esterilizando a estos animales.
La cifra exacta de los hipopótamos no es clara, pues es muy difícil encontrarlos a todos juntos para hacer un balance exacto de su cantidad. “Ellos están permanentemente debajo del agua, y hay unas dos o tres manadas. A veces, unos están arriba y otros están debajo del agua. Es por esta razón que no sabemos a ciencia cierta cuántos hay”, explicó Oberdan Martínez, general del Parque Temático Hacienda Nápoles.
Hemos hecho la gestión para mandarlos otros países, porque hay zoológicos en el exterior que los quieren.
Martínez explica que la hacienda solo cuenta con un hipopótamo hembra, llamada Vanessa. Los demás, que habitan en el lago, hacen parte de la problemática de la región. Es decir, están dentro del lago de la hacienda, pero no pertenecen a ella.
Martínez cuenta que desde la organización que preside han tratado de evitar el desplazamiento de estos animales hacia el pueblo u otros lugares poblados. Por ejemplo, junto al lago les han sembrado pasto para que puedan alimentarse. Dos veces durante el día, además, del parque les llevan zanahoria y pasto picado.
El fin de esta alimentación es que los hipopótamos no tengan que salir a buscar comida. Pero, de un tiempo para acá, Cornare decidió emprender otra forma de solucionar el problema: trasladar a estos animales a zoológicos dentro y fuera del país.
Echeverry explica que esta estrategia se suma a la esterilización que vienen haciendo. “En los últimos años hemos hecho la gestión para mandarlos otros países, porque hay zoológicos en el exterior que los quieren. Sabemos que esta no es la única solución a la problemática, pues no se los van a llevar a todos, pero es una de las líneas de trabajo que tenemos”, expresa el biólogo.
En el municipio hay alrededor de 40 hipopótamos y cada año se reproducen más. Foto:Guillermo Ossa / Archivo EL TIEMPO
Señala el funcionario de Conare, que el procedimiento para el envío de estos animales al exterior es largo y “tedioso”. Esto debido a que el país receptor exige una serie de protocolos sanitarios que se deben cumplir. Además, cuenta Echeverry, el brote de fiebre aftosa que se presentó en junio del año pasado en el país provocó que las negociaciones para reubicar a los hipopótamos se congelaran. Una vez se llegue a buen término con uno de los zoológicos en el exterior, Cornare pasará a la captura y a la preparación para el envío del animal.
Tampoco es que lo vayamos a llevar a Ecuador, por ejemplo, y lo vayamos a soltar allá. No, lo vamos a trasladar a un zoológico en donde lo van a cuidar
El biólogo explica que, dado lo complejo de la tramitología, ningún hipopótamo ha sido enviado a otro país todavía. Por el momento se han hecho gestiones con zoológicos en Perú, Uruguay, México y Ecuador. Echeverry precisó que no se trata de una exportación, como se ha dicho en algunos medios, pues no es un tratado comercial entre dos países. “Tampoco es que lo vayamos a llevar a Ecuador, por ejemplo, y lo vayamos a soltar allá. No, lo vamos a trasladar a un zoológico en donde lo van a cuidar”, puntualizó el biólogo.
Se espera que este año pueda ser trasladado el primer hipopótamo a otro país.
Cabe recordar que la historia de estos animales en la región se remonta a la década de 1980, cuando el narcotraficante Pablo Escobar trajo cuatro hipopótamos para que habitaran en su famosa hacienda Nápoles, su lujosa finca de recreo. Con los años, estos animales se reprodujeron desaforadamente y su población creció de manera exponencial.