Tras el sismo de 1999, Johanna Grajales Osorio y su familia llegaron reubicados al barrio Las Colinas, al sur de Armenia. Y aunque con el tiempo, en el sector se comenzó a presentar drogadicción, prostitución, sicariato, entre otros, ella nunca quiso abandonar a su comunidad. Por el contrario, empezó a buscar soluciones y hace tres años le dio forma a su fundación, Llegó Nuestro Momento, con la que beneficia a niños y jóvenes de las 1.385 viviendas que componen su barrio.
Ella, con tan solo 25 años, fue elegida como la Mujer Comfenalco 2017-2018. Este certamen exalta a las mujeres que lideran programas y acciones humanitarias para contribuir a mejorar la calidad de vida de personas.
Ahora, irá a Bogotá a concursar por el Premio Cafam a la Mujer. Su historia conquistó a los jurados. “Cuando empezaron las amenazas al presidente de la junta comunal y este se tuvo que ir, el barrio quedó sumido en el abandono. No teníamos ni internet porque se robaban los cables, no venían los buses, ni la policía ni los escobitas”, contó.
Con ese panorama, la joven psicóloga emprendió una lucha por una segunda vía de a su sector. Los 7.000 habitantes del barrio solo podían salir o ingresar al barrio por un puente que une a La Adiela con Las Colinas. Sin embargo, había un terreno que los comunicaba con La Patria, pero allí estaban construyendo unas 500 Viviendas de Interés Prioritario para Ahorradores (Vipa) que pretendían separar con un muro. “Las Colinas es como una isla, solo tenía una vía pavimentada y, con la construcción del muro para que no pasamos por ahí, la comunidad sintió el desprecio de la ciudad. Pero ahí iniciamos un proceso de recuperación de la servidumbre”.
Las familias que integran la fundación creen en la transformación del barrio
Con varias protestas y hasta un cacerolazo contra la constructora, además del apoyo de la Personería municipal, Johanna y su comunidad lograron que les construyeran la segunda vía de al barrio.
Con este triunfo, la comunidad del barrio se dio cuenta de que podía trabajar en equipo y cumplir objetivos. “Empezamos a celebrar fechas importantes como el Día de la Madre, Navidad, entre otras para que las entidades públicas pudieran entrar al barrio”.
Luego creó actividades como ‘Jueves de picaíto’, que ha logrado el apoyo de empresas privadas y que reúne a unas 200 personas cada semana en torno al microfútbol. "Juegan a ganarse una pizza, un pollo, en fin; pero no hay árbitro, lo importante es que ellos tienen que autorregularse y aceptar las reglas del entorno, con esto se busca reducir las riñas”.
Empezamos a celebrar fechas importantes como el Día de la Madre, Navidad, entre otras para que las entidades públicas pudieran entrar al barrio
También se ideó ‘Cine al barrio’, donde proyectan películas con un mensaje para los jóvenes y donde todos los asistentes pueden debatir. “Nosotros no tenemos equipos ni video beam pero todos los días buscamos los medios para hacer las actividades”.
Su fundación está compuesta por 32 personas, el integrante más joven tiene ocho años y la mayor tiene 80. “Las familias que integran la fundación creen en la transformación del barrio”. También tiene un espacio en la emisora Zuldemaida Radio, que se emite todos los viernes entre las 12 del mediodía y la 1, y en el que se habla de las cosas buenas que pasan en el barrio Las Colinas.
Ahora con su campaña ‘Una sonrisa en Navidad’ tiene la meta de recaudar 1.500 regalos para los niños de su barrio, además pondrá a rodar un pesebre móvil para llevar las novenas a cada manzana. Las personas que quieran donar regalos la pueden ar a través de la página en Facebook Fundación Llegó Nuestro Momento o dirigirse a su sede en la manaza 3 sector 6 casa 48.
ARMENIA