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Investigación
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Radiografía de las economías ilegales en el sur de Bolívar
La guerra en esta región deja más de 500 familias desplazadas.
Con artefactos explosivos, delincuentes del Clan del Golfo destruyeron la semana pasada maquinaria amarilla con la cual se construía una carretera que comunica al casco urbano del municipio de Morales con el corregimiento las Palmas, en el sur del departamento de Bolívar.
El grupo criminal exige 1.400 millones de pesos al contratista y a las autoridades locales para permitir los trabajos en la obra que beneficia a cientos de familias en esta región.
El pasado viernes, la banda criminal 'clan del Golfo' asesinó a un hombre en el corregimiento de Buenavista, zona rural de Arenal en el sur de Bolívar, donde la guerra entre actores armados ilegales tiene en medio del fuego a comunidades inocentes.
La víctima fue Armando Ospina, transportador fluvial. Una segunda persona que sobrevivió al ataque fue identificada como Élver Ospino.
En esta región del país, Disidencias de las Farc y Eln unieron fuerzas y combaten a sangre y fuego contra el 'clan del Golfo' por las economías ilegales, donde la minería ilegal y la extorsión desplazan al tráfico de cocaína.
Además, según las autoridades, el 'clan del Golfo' estableció un corredor para el ingreso de migrantes venezolanos. Las mujeres son explotadas sexualmente.
Las cifras de muertes violentas, según el instituto de medicina legal y ciencias forenses, dejan claro el recrudecimiento de la guerra criminal en el sur de Bolívar: En el 2018 se presentaron 53 homicidios; en el 2019 hubo 62 homicidios; en el año 2020 hubo 77 crímenes; en el 2021, 87; el año 2022 dejó 116 homicidios y el 2023 dejó 158 muertes violentas en esta región.
Pero tal vez el crimen cometido por actores armados ilegales que más ha consternado a esta región fue el de el líder social Narciso Beleño, presidente de la Federación Agrominera del Sur de Bolívar (Fedeagromisbol), en hechos registrados el pasado 21 de abril en la zona urbana de Santa Rosa del Sur.
Vista aérea del terreno donde extraen oro. El color turquesa del agua es debido al mercurio. Foto:Daniel Muñoz. AFP
La Defensoría del Pueblo había advertido a través de la Alerta Temprana 034 del 2023 el riesgo que perseguía a este defensor, “dimos cuenta de los peligros para distintos grupos poblacionales de los municipios de Santa Rosa del Sur, Cantagallo, San Pablo, Simití, Morales y Arenal, en el sur del departamento de Bolívar”, señala la Defensoría.
El sur de Bolívar está conformado por 17 municipios que suman 476.000 habitantes, de los cuales, según el DANE, el 51 por ciento viven en áreas urbanas. Sin embargo, la distribución poblacional en el brazo de la región llamada 'Las Lobas' y 'La Mojada', el 60 por ciento de las personas habitan en zonas rurales.
Así, este territorio se convierte en un factor neurálgico y estratégico en las estructuras criminales para el reclutamiento forzado de jóvenes, la creación de corredores estratégicos para el pasó de la minería ilegal y, hoy, en menor cantidad de cocaína.
Mientras la guerra se recrudece, el Ejército anuncia la llegada de artillería pesada. La guerra en esta región deja más de 500 familias desplazadas.
De esta región el propio el Gobernador de Bolívar dijo que los grupos criminales superan las capacidades institucionales.
“Las economías criminales o ilícitas son la principal motivación del crimen organizado, y en Colombia tenemos engendros de violencia y criminalidad, que es precisamente donde nacen esas economías criminales: en el Catatumbo, Tumaco, Urabá, pero además la frontera con Venezuela a la altura del departamento de Arauca, y en los últimos años en el sur del departamento de Bolívar”, señala el capitán (r.) de la Policía Juan Carlos Buitrago, experto en economías ilegales.
Ejército de Colombia. Foto:Cortesía Ejército
Según este experto, estas son regiones con alta influencia de grupos criminales, de las disidencias, de los grupos terroristas como el Clan del Golfo. Grupos criminales que se lucran del narcotráfico, la minería ilegal, el contrabando inclusive del tráfico de armas y la trata de personas.
La organización para la cooperación y el desarrollo económico, OCDE, señala que las economías ilegales mueven cerca de 800.000 millones de dólares y puede llegar a representar entre el 8 y el 15 por ciento del producto interno bruto de una nación en desarrollo como lo es Colombia.
“Aquí tenemos unas economías criminales que se están reproduciendo en estos territorios y que tienen alcance internacional y global, que además están impactando la seguridad al interior de nuestro territorio. Se trata de grupos delincuenciales que han convertido el crimen en un negocio y difícilmente podríamos hablar de grupos con ideologías; aquí lo que hay es bandas criminales, narcotraficantes y terroristas”, añade Buitrago.
Los pasados 7 y 8 de marzo se presentó en Mompox el estudio: Las Violencias en el Sur de Bolívar: fragilidad institucional economías ilícitas y cooptación del estado, a cargo de un grupo de investigadores del Instituto Internacional de Estudios del Caribe de la Universidad de Cartagena.
“Hoy quieren reencauchar la paz total del Gobierno Nacional simple y llanamente para lavar el dinero producto del narcotráfico especialmente de otros delitos, y se están enriqueciendo estos criminales: aquí hablamos de minería ilegal, de contrabando, de tráfico de armas, pero también, como ocurre en el Perijá, con tráfico de migrantes”, agrega el capitán (r.) Juan Carlos Buitrago.
Campamentos ilegales. Foto:Brigada 17 - Ejército Nacional
El sur de Bolívar es un territorio con una gran masa de comunidades campesinas, que hoy son blanco de los violentos, como lo ha sido en los últimos 70 años.
“Esta región, desde inicios de este siglo, se convirtió en escenario de disputas a sangre y fuego por las economías criminales: primero la explotación del oro, desde la Serranía de San Lucas, en lo que se llama las minas de Huánuco”, explica el profesor Amaranto Daniels, director del Centro de Estudios Internacionales y del Caribe.
En esta región, partir del año 1992, aparece los primeros sembrados de cultivos ilícitos, con un promedio de 10 hectáreas. Hoy en día hay más de 16.000 hectáreas sembradas con cultivos ilícitos, explica Daniels.
Históricamente, el sur de Bolívar fue cuna de la guerrilla del Eln, que hoy mantiene una fuerte presencia en el territorio.
Los 17 municipios del sur de Bolívar son estratégicos porque colindan con Santander, Antioquia y el Magdalena Medio es decir el territorio es un de Bolívar es geoestratégico para los corredores de narcotráfico extorsión trata de migrantes hoy en día y de redes de prostitución.
“Ha habido una especie de autogobierno que hoy se disputan las estructuras criminales del territorio: la junta de acción comunal, porque el sur de Bolívar históricamente desde los años 50 fue colonizado y ampliada la frontera agrícola por los violentos en el marco de la violencia y partidista de los años 50 y 60 del siglo pasado es decir, un reciclaje de la violencia en el sur del departamento”, añade Daniels.
De hecho, como lo denunció la MOE, las ultimas justas electorales han estado impactadas por las presiones de los grupos armados ilegales.