Santa Marta estrena su primera estación de recarga para vehículos eléctricos en la Unimagdalena

Santa Marta cuenta desde este fin de semana con su primera estación de recarga para vehículos eléctricos, un proyecto innovador liderado por la Universidad del Magdalena que se ha convertido en pionero en el ámbito de la movilidad sostenible en la ciudad.

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La estación, destinada al servicio gratuito de la comunidad universitaria, representa un avance significativo para la ciudad en el uso de energías renovables y la reducción de su huella de carbono.

La idea de instalar esta estación surgió en respuesta a las necesidades de estudiantes y profesores que, cada vez en mayor número, utilizan vehículos eléctricos como scooters, bicicletas, motocicletas y automóviles.

En el último año, un 30 por ciento de estudiantes y profesores dieron un paso a la movilidad sostenible al adquirir vehículos en su mayoría bicicletas, motocicletas y patinetas eléctricas para dirigirse de sus casas al alma mater.

Según el rector de la Universidad, Pablo Vera Salazar, “esta estación es una apuesta novedosa de energías renovables, pionera en universidades públicas. Es un paso hacia la transición a energías limpias y celebramos que más de la comunidad universitaria opten por vehículos que no generan contaminación”.

A diferencia de otras ciudades del país, Santa Marta aún no contaba con infraestructura dedicada a la recarga de vehículos eléctricos. Este proyecto no solo marca la primera estación de este tipo en una universidad pública de la región, sino que también es la primera en toda la ciudad.

Gracias a su funcionamiento mediante es solares, la estación ubicada en el interior del campus universitario garantiza un proceso de recarga completamente limpio y sustentable.

El sistema permite recargar desde pequeños vehículos eléctricos como bicicletas y scooters hasta automóviles, todos utilizando una energía 100% renovable.

Según Vera Salazar, la instalación refuerza el compromiso de la Universidad con la sostenibilidad, en línea con su Plan de Desarrollo Institucional, que busca promover una infraestructura más moderna y ecológica.

Uno de los s más entusiasmados con la nueva estación es Álvaro Espeleta, docente de la Facultad de Ingeniería de la Universidad, quien desde hace tiempo se ha sumado a la transición hacia la movilidad eléctrica.

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“Yo estoy brincando de la emoción. Mi carro será el primero en utilizar esta estación. Antes, recargarlo solo era posible en casa, lo que generaba costos adicionales. Ahora tenemos esta estación que permite una planificación más eficiente”, comentó el profesor.

Espeleta explicó que su vehículo tiene una autonomía de 420 kilómetros y que, con esta estación, puede recargar un 10% de la batería en una hora.

“Para una carga completa, necesitaría unas ocho horas, lo cual es perfecto para quienes pasan mucho tiempo en el campus”, señaló el docente, quien además aplaudió el compromiso de la Universidad con la sostenibilidad.

Víctor Olivero Ortiz, docente de Ingeniería Electrónica, enfatizó que esta estación es una gran apuesta hacia la sostenibilidad: “Nos estamos convirtiendo en un campus autónomo energéticamente gracias al uso de energía solar. Esta primera estación de recarga de vehículos representa una oportunidad real de transformar nuestra ciudad”.

Por su parte, Silenis Restrepo Oñate, del grupo de infraestructura de la Universidad, resaltó que la iniciativa también podría motivar a más personas a adquirir vehículos eléctricos.

“Esta estación nos facilita la vida a quienes ya tenemos vehículos de este tipo. Esperamos que muchas más personas se animen a dar el paso hacia la movilidad eléctrica”, indicó.

La estación, además de ser un alivio económico para los s que ya no tendrán que depender de la energía de sus hogares para recargar sus vehículos, representa un esfuerzo por hacer de Santa Marta una ciudad más verde y preparada para los retos de la sostenibilidad.

Los almacenes dedicados a la venta de vehículos eléctricos aseguran que en el último año se incrementaron en un 100 por ciento, el número de clientes que adquieren motocicletas y bicicletas recargables por la facilidad de uso, cero restricciones, comodidad y uso amigable con el medio ambiente.

“En Santa Marta por ser una ciudad que todo queda relativamente cerca, cada mes, son muchas las personas que nos visitan para adquirir sus vehículos eléctricos. La gente está muy contenta y satisfecha con el cambio”, manifestó Freddy Gómez, de un negocio  de vehículos eléctricos, quien asegura que a medida que se generen estaciones de recarga, serán muchos más las personas que se incentiven a adquirir su medio de transporte de energía eléctrica.

Por Roger Urieles

Para EL TIEMPO Santa Marta

En X: @rogeruv