Jardín Infantil Stanford, pionero en la implementación del PEP

Con una trayectoria de más de 15 años, el Jardín Infantil Stanford logró obtener la
autorización por parte de la Organización del Bachillerato Internacional, convirtiéndose así en el único jardín infantil autorizado en Latinoamérica para impartir el Programa de la Escuela Primaria (PEP) del Bachillerato Internacional (IB). A pesar de los significativos desafíos, incluyendo capacitaciones, ajustes y evaluaciones, cumplió con los requisitos establecidos. "Aunque el IB tiene criterios establecidos, respetan la esencia del jardín. Revisamos cómo estábamos respondiendo y qué debíamos modificar para dar vida al PEP en nuestro jardín. Nos capacitamos, trabajamos con los niños y sus familias y recibimos la autorización ajustándonos a los parámetros establecidos por las autoridades educativas", destaca Ángela Correa Céspedes, rectora del Jardín Infantil Stanford.

El PEP del IB se presenta como una iniciativa educativa innovadora y transformadora,
diseñada para niños de 3 a 12 años con el propósito de brindarles una educación
integral que fomente valores, habilidades y experiencias, que contribuyan a la construcción de un mundo más pacífico y equitativo. Según Correa Céspedes, “este
programa se centra en desarrollar habilidades comunicativas y de indagación desde
una edad temprana, impulsando la autogestión y proporcionando las herramientas
adecuadas para que los niños construyan conocimiento y den sentido a lo que
aprenden”.
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​En ese contexto, se estructura mediante unidades transdisciplinarias que permiten integrar todas las áreas de aprendizaje, proporcionando a los niños una experiencia educativa significativa y enriquecedora desde los tres años. El método de enseñanza, constructivista y basado en la experiencia directa y la indagación, permite que el docente actúe como mediador y facilitador del aprendizaje, mientras que los niños tienen o con especialistas en diversas áreas. Además, tanto la comunidad como los padres desempeñan un papel crucial en el proceso educativo de los niños. "Esta colaboración fortalece el aprendizaje y promueve un ambiente de apoyo y cooperación. Los padres participan en el día a día de sus hijos, siendo informados por ellos mismos sobre su progreso y partícipes de sus logros semanales”, explica Liliana Ayure Maldonado, coordinadora del PEP en el Jardín Infantil Stanford.

La evaluación del progreso de los alumnos se realiza de manera cualitativa, centrándose en su desarrollo y metas propuestas. A partir de la implementación del PEP, se ha fomentado la participación activa de los niños mediante la autoevaluación, lo que les da la posibilidad de analizar su progreso y establecer objetivos para su mejora continua. Los maestros del Jardín Infantil Stanford reciben una formación específica para impartir el PEP, con dos años de capacitación directa con el IB y asesoría continua.

En cuanto a proyectos y actividades, un ejemplo notable es el proyecto sobre medios
de comunicación a través del tiempo, donde los niños entre cuatro y cinco años crearon soluciones futuristas, como una máquina de lectura mental. Investigando y utilizando vasos desechables y marcadores, lograron hacer realidad este artefacto que serviría para leer la mente y escribir mensajes como lo harán las personas en el futuro, especialmente aquellas que no puedan comunicarse de manera eficaz.

"Con iniciativas como estas, nos hemos dado cuenta de que los niños están siendo más audaces en el aprendizaje, quieren aprender más y conocer más del mundo. Están generando un pensamiento crítico muy positivo y quieren ayudar al otro, lo cual es fundamental" ,añade Ayure Maldonado, concluyendo que “esto es lo que los niños necesitan hoy en día: una educación diferente, centrada en la indagación, que les dé la posibilidad de desarrollar habilidades sociales y comunicativas".

Para mayor información ingrese a https://jardininfantilstanford.edu.co/.