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Explicativo
Le suena mucho la barriga a mi perro: ¿cuándo preocuparse e ir al veterinario? Hay síntomas de alerta
● El estado de ánimo del canino le revelará si algo anda mal.
● En algunos casos, es una reacción normal.
Estos ruidos se pueden producir después de que su mascota coma. Foto: iStock
Cada vez son más las personas que tienen mascotas en el hogar. Al compartir tanto tiempo y experiencias con estos animales, se vuelven un miembro más de la familia. Por eso, todo lo que les ocurra resulta importante para quienes los cuidan.
Si bien los perros suelen hacer ciertos ruidos o reaccionar con movimientos bruscos, así no sean los más activos, no siempre es normal que de sus cuerpos se emitan sonidos extraños.
A veces uno quiere encontrar todas las respuestas en casa o consultar con Google; sin embargo, ante cualquier aparición que no considera común, es esencial que se e con su clínica veterinaria de cabecera o que llame a algún experto en cuidado animal.
Si alguna vez ha escuchado que a su perro le suena la barriga después de comer o de tomar agua, sepa que según el blog especializado en animales ‘Kiwoko’, esta reacción es algo completamente normal. Esto es más común si el animal “ha ingerido mucho alimento en poco tiempo”, según afirman.
Hay algunas reacciones que no representan riesgo para los animales. Foto:iStock
Además del caso antes mencionado, es normal si su mascota está acostada o manteniendo sus actividades regulares y le suena la barriga si lleva mucho tiempo sin comer, ya que lo que se está produciendo es una activación de “señales hormonales” o de su sistema digestivo.
Si la mascota tiene una buena digestión, actuará de forma regular. Foto:IStock
¿Cuándo preocuparse por sonidos en el estómago?
Según Manuel Lázaro, vocal del Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid, consultado por ‘Huffington Post’, los perros avisan que están enfermos. Por eso, dejará de ser algo normal un síntoma cuando el canino tenga cambios de conducta o falta de ánimo.
Además, el portal de salud de mascotas ‘Barbiku’ asegura que estos gases de la digestión también pueden indicar que su animal comió muy rápido o que ingiere un alimento en mal estado. Por eso, debe estar atento a si presenta vómitos o diarrea, ya que esto será una señal para atenderlo de forma inmediata.
No atender una afección estomacal, puede derivar en una de las peores enfermedades que un perro podría experimentar: la torsión gástrica. Según ‘SURvet Diagonal’, esta complicación está relacionada con una dilatación en la zona del abdomen, quejidos, falta de apetito y cambios en su carácter.
La recomendación es que siempre esté atento de las deposiciones de su animal, inflamaciones, estado de ánimo y apetito de su mascota, pues cualquier cosa se puede evitar si se actúa a tiempo.
MARIANA SIERRA ESCOBAR
EQUIPO ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
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