En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Millonarios: consecuencias garrafales de un proyecto deportivo liviano
La eliminación de Copa Libertadores no sorprende. Era lo que presagiaba el plan de gestión del club.
Alberto Gamero, técnico de Millonarios. Foto: Héctor Fabio Zamora / EL TIEMPO
Millonarios volvió a chocar contra la pared del fútbol internacional. En esta oportunidad, por Copa Libertadores, el conjunto bogotano cayó a manos de Fluminense, el primer equipo de Río de Janeiro creado exclusivamente para el 'futebol'.
Los dirigidos por Alberto Gamero acumularon un 1-4 en el marcador global y se despidieron sin pena ni gloria del mayor torneo regional. En el recuerdo de los hinchas quedará que Millonarios empezó ganando la serie en el primer juego, pero que, producto de la falta de jerarquía, una expulsión derrumbó todo. En los registros tan solo se leerá que los embajadores fracasaron, por enésima vez, en su salida internacional.
La visión más optimista recuerda que hoy por hoy Millonarios es el líder del fútbol colombiano. Que a pesar de preservar el descanso de sus titulares para los duelos contra Fluminense, el conjunto albiazul sumó dos victorias en sus últimos juegos con futbolistas todavía más jóvenes que los que integran su formación de gala. Que actualmente es el equipo que a la fecha ha tenido el mejor rendimiento como visitante: once puntos de quince posibles. Y que, además, la valla de Álvaro Montero, con tan solo tres goles, es la menos vencida de la Liga 2022-I.
Lo anterior pareciera indicar que en casa todo es una maravilla. El tema es que en Millonarios, desde hace rato, así se da el camino, pero no la meta.
En el segundo equipo más ganador de Colombia, hoy en día el proyecto deportivo es tan solo uno: confiar en lo que puedan hacer los jugadores de la cantera. Así han sido las cosas desde los últimos tres años, cuando Alberto Gamero, un experto en planteles con rasgos adolescentes, llegó a dirigir al club.
En un comienzo, todo era logro: "Ahí va el 'Kínder' de Gamero". Así estuvo cerca de ser campeón de la Liga BetPlay en dos oportunidades. Pero así también quedó eliminado dos veces seguidas por el modesto Alianza Petrolera en la Copa Colombia y ha fracasado en el exterior.
Ahora, la derrota tiene además un peso económico: si hubiera clasificado a la fase 3, habría recibido otros 600 mil dólares de la organización (en la fase 2 fueron 500 mil). Y si llegaba a fase de grupos, por los tres encuentros en El Campín, hubiera podido recibir tres millones más (cifra que, por ejemplo, ya aseguraron Tolima y Cali).
Fallas en la hoja de ruta
Millonarios vs. Cortuluá Foto:Mauricio Moreno. EL TIEMPO
El hincha se duele, pero los directivos ya habían avisado. En el plan proyectado por los dirigentes hasta 2025, según se pudo conocer extraoficialmente, no estaría contemplado obtener ningún título. En el documento filtrado se habla escuetamente de "Disputar al menos una final", "clasificar a fases de torneos internacionales" y, en síntesis, "vender jugadores".
Esa parece ser la meta del club. Hacer lo posible con los juveniles y mandar uno que otro al exterior. No en vano, las tres salidas que tuvo el equipo para este torneo, Emerson Rivaldo Rodríguez, Fernando Uribe y Daniel Giraldo no fueron reemplazadas con hombres del mismo peso.
Gamero, cabeza de la parte deportiva, tampoco parece mostrarse muy preocupado:
“Tenemos una nómina que pienso que está capacitada para pelear el título. A eso aspiramos todos los 20 equipos, además tenemos la misma idea de juego y esto nos va a traer buenos resultados”, dijo a comienzo de año.
Este martes, tras la derrota con Fluminense, se mantuvo optimista: "El resultado fue muy amplio para lo que se vio, queda uno con desazón por lo que vinimos a competir, e irnos con las manos vacías, pero esto es aprendizaje, y vamos por buen camino".
Nadie va a decir que no se le de importancia a la cantera. Eso es primordial. El problema es que los juveniles no pueden cargar con toda la esperanza de un club. No ocurre en Europa, mucho menos funciona en Colombia. Y los reiterados fracasos en torneos internacionales y la falta de títulos lo confirman. Ese es el caso de Millonarios.