En la clausura del Congreso de Anif, el presidente Gustavo Petro aseguró que para que Colombia pueda crecer el próximo año en medio del riesgo de recesión mundial el país deberá llevar a cabo una política anticíclica centrada en gastar solo en lo que pueda reactivar la economía medido en puestos de trabajo.
Para ello, señaló que se le deberá apostar a la producción, al agro, a la industria, a la construcción y al turismo, que son realmente los generadores de riqueza del país. Al contrario, aseguró que se le deberá dar cada vez menos importancia al sector minero-energético, el cual es el responsable de las mayores emisiones de CO2.
“En el panorama internacional hay una alta probabilidad de recesión mundial, sumado a la crisis climática, que la pérdida podría sobrepasar los 10 billones de pesos, y a la presión de la inflación de alimentos. Estamos en tiempos que realmente son turbulentos, yo les denomino de crisis estructural. El arte de los gobiernos consiste en gobernar la crisis”, señaló el mandatario.
Petro dijo que lo que Colombia debe hacer en medio de este contexto de turbulencia a nivel internacional es poner el foco en los sectores y ramas económicas que tienen mayor incidencia en los puestos de trabajo.
“Si miran el sector minero-energético y lo comparan con el de la construcción o del turismo, los dos últimos llevan la ventaja en intensidad de puestos de trabajo. Si no se mide la economía en puestos de trabajo sino en moléculas de CO2 equivalentes emitidas a la atmósfera el primero es el que lleva la delantera. Este crea una mayor tensión entre la vida y la inercia. Hay que tratar de cambiar”, dijo.
¿Cambiar el petróleo por el turismo?
Por ejemplo, indicó que a corto plazo el turismo podría llegar a cambiar las actuales divisas de la factura petrolera. “Las exportaciones de petróleo al año son unos 15.000 millones de dólares. Si lográramos tener una facturación por turismo cercana a esa cifra tendríamos éxito en relación al riesgo que se cierne sobre nuestra balanza de pagos”, puntualizó.
Según la Agencia Internacional de Energía, -señaló Petro- la demanda de petróleo en el mundo bajará al 75 por ciento de la actual en el 2030 y los primeros petróleos en salir del mercado serían los más pesados y Colombia es uno de los productores.
“Nosotros estamos en una situación vulnerable, entonces tenemos que ver cuál es la política para mitigar ese riesgo. Creemos que si expandimos el turismo tendríamos un éxito de corto plazo”, sostuvo.
La apuesta por el agro
Adicional a ello, dijo que es necesario que Colombia también expanda la agricultura porque el mundo está en una crisis climática y va a necesitar alimentos.
“Si hoy hay inflación de alimentos a escala mundial es porque, entre otras razones, hay una escasez de alimentos. ¿Por qué? Porque se agotan las tierras, por eso es que la gente, por ejemplo de Suramérica o Centroamérica, está tratando de cruzar el río Bravo. El equilibrio vital, el agua y los alimentos, se ha roto en una parte del mundo. Y eso se ha traducido en migrantes”, sostuvo.
El papel del sistema financiero en este contexto de desaceleración
También dijo que el sistema financiero debe dejar de invertir en sí mismo para empezar a privilegiar inversiones en los sectores que generan riqueza, como el agro, la industria, la construcción y el turismo
Adicional a ello, dijo que el Estado debe conjugar políticas para aumentar la rentabilidad en la producción de alimentos. Para ello, -señaló- se han subsidiado fertilizantes y está en marcha la reforma agraria.
“El sector agrario que hoy está en recesión podría crecer y por tanto generar empleo. Si lo mismo hacemos en la industria, el turismo y la construcción lo que tendríamos es un aumento de empleo”, dijo.
En resumen, dijo que el país se deberá concentrar en tres puntos: en la compra de equipos y maquinaria, en intentar aumentar el PIB industrial y en apostar por el comercio exterior en productos no tradicionales (petróleo y carbón).