Los retiros anticipados de pensiones que se han llevado a cabo en países como Perú y Chile desde que empezó la emergencia generada por la pandemia dejarían a más de 9 millones de trabajadores con saldo cero en sus cuentas (5 millones peruanos y 4 millones chilenos), es decir, sin nada de lo ahorrado en toda su vida laboral para el momento de pensionarse.
En el caso de Perú, con los cinco retiros que se aprobaron entre el inicio de la pandemia en 2020 y el año pasado, se sacaron cerca de 18.000 millones de los fondos de pensiones, una cifra que equivale al 8,1 por ciento del PIB. Además, 2,3 millones de afiliados quedaron en ese periodo sin saldo en sus cuentas.
A pesar de ello, la Comisión de Economía del Congreso peruano volvió a aprobar recientemente un sexto retiro anticipado para que los afiliados al sistema de capitalización individual puedan sacar hasta 4.975 dólares de sus cuentas.
Con este nuevo retiro, se estima que cinco millones de trabajadores peruanos, el 60 por ciento de los afiliados, se quedarán sin ningún dinero en sus cuentas. Además, se reducirían los ahorros pensionales en cerca de 7.400 millones de dólares.
La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) de Perú expresó su desacuerdo con este proyecto e indicó que permitir este retiro anticipado es contraproducente para la cobertura social.
Para el caso chileno, los tres retiros aprobados hasta la fecha han significado un desembolso de más de 52.000 millones para las as de Fondos de Pensiones (AFP) que istran este ahorro individual, lo que equivale al 30 por ciento del total que había antes de los retiros y al 18,4 por ciento del PIB. Con ello, cerca cuatro millones de personas se quedaron con saldo cero.
Hace unos días, el Congreso chileno rechazó el cuarto y quinto retiro anticipado. Si se hubiera aprobado un nuevo retiro de hasta el 10 por ciento de los fondos, las AFP estiman que las pensiones hubieran caído en promedio un 40 por ciento y 5,8 millones de personas hubiesen quedado con saldo cero en sus cuentas.
“Estos retiros son una irresponsabilidad infinita. Es un contrasentido que después de que obligan a ahorrar de repente digan que se puede sacar el dinero para el consumo presente. Se trata de una medida popular para ganar un aplauso fácil”, aseguró Guillermo Arthur, presidente de la Federación Internacional de as de Fondos de Pensiones (Fiap), quien recalcó que muchas de las personas que sacaron sus ahorros los utilizaron para la compra de autos o de móviles, que se dispararon.
En ese sentido, destaca que las ventas de vehículos en Chile anotaron en el 2022 su mejor inicio de año desde que se tengan registros. Según la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac), hubo 37.281 unidades nuevas, un aumento de 49,2 por ciento respecto a enero del 2021.
El riesgo de una mayor inflación
Estos retiros anticipados han provocado una inyección de liquidez en las economías, lo que ha impulsado el incremento de los precios y se ha agudizado el problema pensional afectando, en últimas, a los trabajadores de más bajos ingresos.
Según la Fiap, esta no es una buena decisión a futuro y los retiros de fondos anticipados deberían ser siempre la última opción. En ese mismo sentido, David Cuervo, director de Wealth en Mercer para la región andina, apuntó que en Perú y en Chile la situación crítica ya desapareció y “hoy por hoy no se debería justificar que se sigan sacando más recursos porque ya no están en una situación extraordinaria”.
Respecto al impacto en los precios, por ejemplo, en marzo, Chile alcanzó una inflación a doce meses de 9,4 por ciento, nivel no visto desde octubre del 2008, y el ministro de Hacienda, Mario Marcel, estimó que si se aprobaba otro retiro podría escalar hasta el 16 por ciento.
Otro efecto de los retiros es que se ha dado un encarecimiento de todos los tipos de créditos. Hubo un fuerte impacto en el mercado de capitales local por las liquidaciones forzosas de un gran volumen de activos, lo que a generó un alza en las tasas de interés para todos los plazos y tipos de créditos.
Adicional a ello, en el caso específico de Perú, hace unas semanas Standard and Poor’s bajó la calificación crediticia del país que lidera Pedro Castillo y una de las razones para tomar esta decisión fueron los retiros de los fondos de la AFP.
Los retiros de cesantías
El hecho de usar el ahorro de las pensiones para enfrentar la crisis también se discutió en otros países de la región sin llegar a buen término. En el caso específico de Colombia, a finales del año pasado llegó al Congreso una iniciativa que buscaba crear un programa de retiro parcial de la pensión para poder sacar el 10 por ciento del total de la cuenta individual.
Para Santiago Montenegro, presidente de Asofondos, retirar los ahorros es hacerle un daño a la seguridad social gigantesco. “En Colombia afortunadamente no se ha hecho y cuando se ha tratado se ha armado una coalición entre algunos partidos políticos, académicos, Gobierno, gremios y centrales obreras. Uno de los argumentos es que esos retiros son pan para hoy y hambre para mañana y que hay otras formas de enfrentar las consecuencias de la pandemia”, le dijo el líder gremial a EL TIEMPO en el Congreso Internacional Fiap Asofondos que se llevó a cabo el jueves y viernes en Cartagena.
Lo que sí se permitió en el país fue que los afiliados pudieran hacer retiros parciales de sus cesantías mientras dure la emergencia sanitaria, siempre y cuando sus ingresos se vean disminuidos por cuenta de la coyuntura de la pandemia. Esto, aparte de poder retirarlas por terminación de contrato, para estudiar o para vivienda, como habitualmente se permite.
En total, Asofondos calculó que desde marzo de 2020 hasta diciembre del 2021, la crisis que dejó a personas desempleadas y con menores ingresos ocasionó que de los fondos de cesantías se retiraran hasta 4,4 billones de pesos.
Según Cuervo, de Mercer, en Colombia no pasó lo mismo que en Chile y Perú porque se usaron las cesantías y por la propia forma del sistema que tiene a personas cotizando también en Colpensiones. “Si yo puedo sacar los ahorros de los fondos privados, qué se haría con las personas en Colpensiones. Es algo inequitativo”, dijo.
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