Aunque en las reformas propuestas por el Gobierno para este año los ajustes al sistema pensional colombiano no están en la agenda, el Ejecutivo ya anunció la primera línea de acción de los ajustes que vendrán en esta materia, y cuyo foco inicial será lograr una cobertura total en pensiones, dándoles un bono mensual a unos 3 millones de adultos mayores que hoy no reciben una mesada como tal.
Para ello, el presidente Gustavo Petro, durante la posesión de varios nuevos funcionarios de su istración, entre ellos la nueva directora del Dane, Piedad Urdinola, aseguró que desde el año entrante se buscará que el bono que esta población recibe pase de 80.000 pesos actuales a 500.000 pesos, “y haga que el viejo no pensionado pueda superar la línea de pobreza”.
Y agregó que la medida implicará una reforma pensional, mediante la cual parte de las cotizaciones que hoy van a los fondos de pensiones privados entren a Colpensiones para destinar los recursos a dicha población.
En la práctica, se trataría de que cada mes se tomen de los aportes de los afiliados a los fondos privados recursos por 1,5 billones de pesos, situación que desde la campaña presidencial fue cuestionada por Asofondos, gremio que representa a estas entidades. En los debates presidenciales anteriores a las elecciones, el presidente del gremio Santiago Montenegro, pidió a los candidatos los candidatos presidenciales dar una discusión rigurosa, responsable, informada, y “sobre todo pensando en el bienestar de los trabajadores colombianos”.
Aunque al cierre de esta edición no fue posible ar al directivo, varias fuentes del sector cuestionaron, de nuevo, las razones por las cuales con el esquema propuesto se financiarían subsidios con plata ajena, es decir la de los trabajadores.
Y, al mismo tiempo, se preguntaron que si se gastan estos recursos cuál sería la forma de pagar las pensiones futuras de los trabajadores que hoy cotizan al sistema pensional, a través de los fondos privados.
En marzo, el expresidente de Colpensiones, Mauricio Olivera, hoy vicerrector istrativo y Financiero de la Universidad de los Andes, fue claro al señalar que estos subsidios deben financiarse con plata del Estado y no con ahorros de los colombianos, por lo cual se necesitaba más claridad.
“Sería como gastarse el futuro de los colombianos en el presente y eso en otros países ha llevado a la quiebra de los sistema pensionales, porque el dinero se usa para otras cosas”, advirtió en su momento.
A su turno, Mario Cruz, director de Seguridad Social, Vida y Personas de Fasecolda, gremio de las aseguradoras trinó ayer: “Drenar 3/4 partes de recursos implica menos ahorro y rendimientos futuros. Ancianos actuales recibirán subsidios, pero jóvenes trabajadores actuales difícilmente se pensionarán”.
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REDACCIÓN EL TIEMPO