Los potenciales compradores de vivienda de clase media en Colombia siempre se quejaron porque estaban en un ‘sánduche’ que les impedía ser propietarios: no eran tan necesitados para acceder a los subsidios del Estado destinados especialmente a los segmentos 1 y 2, o los recursos no les daban para adquirir una vivienda de estratos 5 o 6.
Sin embargo, cuando la situación económica del país estuvo en alerta, el subsidio a la tasa de interés como medida contracíclica fue un mecanismo de reactivación al que este segmento respondió con creces.
Con la expectativa de que la crisis inmobiliaria mundial del 2008 podría dejar secuelas en Colombia, en abril del 2009 nació esta figura que les tendió la mano a ellos, a los del ‘sánduche’. Y fue una decisión acertada, con la cual se impulsaron las ventas de vivienda nueva.
Aunque en otras ocasiones se revivió temporalmente, la pandemia volvió a poner sobre la mesa la conveniencia del beneficio, que se retomó en mayo del 2020 a través de 100.000 subsidios, a los que se sumaron otros 100.000 para vivienda de interés social (VIS).
De nuevo, la respuesta de la clase media fue contundente: en el 2020 se comercializaron en el país 194.802 viviendas nuevas y con una participación de más de 60.000, el rango medio (No VIS) siguió acomodándose a un mercado dominado, de todas formas, por la VIS.
Para un segmento que estaba de capa caída, sumar propietarios y viviendas en plena pandemia fue una gran noticia, que se reforzó hace unos días con un anuncio del presidente de la República, Iván Duque: dejar activo en el anteproyecto para el Presupuesto General de la Nación del 2023 el Fondo de Reserva para la Estabilización de la Cartera Hipotecaria (Frech), de donde salen los recursos para el beneficio.
Cómo van las ventas en el 2021
Estas son las cifras del 2021: a octubre, según la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), se vendieron 198.771 viviendas nuevas, que representaron un aumento de 24 por ciento frente al mismo periodo del 2020 y, de estas, 46.605 fueron de estrato medio, con precios entre 136 millones y 454 millones de pesos.
Incluso, del estrato alto –casas y apartamentos con precios de más de 454 millones de pesos–, se vendieron 12.726 unidades para un incremento de 20,7 por ciento durante el año corrido, a octubre, frente al mismo lapso del 2020, lo que demuestra que cada rango de precios de mueve como un relojito, según las alertas del mercado.
Cierto, la VIS sigue mandando y está bien, porque es donde se concentran las necesidades. Sin embargo, los del ‘sánduche’ ya no tendrán que aplazar el sueño de tener su vivienda y dejar otros en espera, porque las cuentas no les cuadraban. Ahora, hay espacio para todos.
GABRIEL E. FLÓREZ G.
Especial para EL TIEMPO
@GabrielFlorezG