Ricardo Bonilla, la quinta ficha del gobierno Petro que se cae por escándalo de la UNGRD

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se convirtió en la quinta alta ficha del gobierno del presidente Gustavo Petro en salir del gabinete por el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en el cual también están salpicados siete congresistas.

(Puede ver: Atención: Fiscalía citó a diligencia a Carlos Ramón González por escándalo de la UNGRD)

A través de su cuenta de X, este miércoles el jefe del Estado le pidió la renuncia a su funcionario luego de que se conocieron varios señalamientos de que a través de su asesora María Alejandra Benavides, habría intentado entregar proyectos de la UNGRD a legisladores que iban a favorecer sus reformas. Según Petro, de Bonilla espera su renuncia "no porque crea que es culpable, sino porque lo quieren despedazar por ser leal al programa de Gobierno y quieren derribar inconstitucionalmente este gobierno".

La solicitud se conoce, precisamente, cuando trascendió que hace unas semanas Bonilla le envió a la Fiscalía una denuncia en la que se señala que supuestamente el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, y Nicolás Alcocer, el hijo de la primera dama, Verónica Alcocer, están inmersos en una contratación sospechosa ligada a la hidroeléctrica de Urrá.

Antes del jefe del Ministerio de Hacienda, la exconsejera para las Regiones Sandra Ortiz fue la otra ficha que salió del Gobierno. A inicios de mayo pasado, Petro le aceptó su renuncia tras ser salpicada en el escándalo como la presunta intermediaria para entregarle 3.000 millones de pesos al senador Iván Name, quien también iría a beneficiar al Gobierno en las reformas a discutirse en el Congreso. 

Para la fecha de que se apartó del gabinete, Ortiz le agradeció al primer mandatario la "oportunidad invaluable" que le dio de se parte del equipo de Gobierno. "Esta experiencia ha sido un periodo de constante aprendizaje y crecimiento, en el que he podido colaborar con nobles ideales a favor de Colombia", dijo Ortiz, quien fue imputada por la Fiscalía por los delitos de tráfico de influencias y lavado de activos.

Asimismo, el pasado 8 de agosto, Carlos Ramón González se cayó de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) cuando se le mencionó como quien estaría detrás de las órdenes a demás funcionarios para la entrega de coimas. Él es otra de las figuras más cercanas al presidente Petro.

César Manrique, quien fungió como director de Función Pública, también está relacionado al entramado ilegal que han venido destapando la Fiscalía y la Corte Suprema. Su supuesto nexo tiene que ver con que a través de Luis Carlos Barreto, exfuncionario de la UNGRD, habría intentado direccionar 100.000 millones en contratos. El ente acusador ya tiene su nombre bajo la lupa, luego de que Barreto decidió colaborar con la justicia a cambio de que le rebajen la condena. 

Por último está uno de los protagonistas de este escándalo: Olmedo López. Como jefe de la Unidad, él habría sido el enlace estrella para direccionar las órdenes que recibía de Palacio con el fin de destinar recursos en contratación a los congresistas interesados. Apenas estalló el caso de los 40 carrotanques para llevar agua a la Alta Guajira, López renunció a la Unidad. Su caída se materializó el 29 de febrero de este año.

Ahora bien, en medio del escándalo, el 29 de junio pasado, el propio Petro confirmó la salida de Luis Fernando Velasco del Ministerio del Interior, quien fue reemplazado por Juan Fernando Cristo. El nombre del exministro también ha salido salpicado en este caso de corrupción. De hecho, en la investigación que lleva la Corte contra varios congresistas es clave una reunión sostenida el 27 de noviembre de 2023, en el Dapre, cuando el entonces ministro Velasco, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez; el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo; el exdirector del Dapre, Carlos Ramón González, y Olmedo López habrían intercambiado información sobre el avance de las reformas en el Congreso.

En ese encuentros, según en las declaraciones que ha dado López a las autoridades, fue donde “todo quedó acordado”, haciendo alusión a que el entonces ministro del Interior habría informado de los acuerdos alcanzados con congresistas a cambio de dádivas. 

Carlos López y Jesús Blanquicet - Justicia - @JusticiaET