Luego de analizar varios informes sobre reclutamiento forzado de menores por las Farc, y de violencia sexual a niños reclutadas a la fuerza, así como estudiar documentos producidos por las Farc en sus conferencias, la
Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) vinculó y citó a versión libre a los exjefes guerrilleros que pertenecieron al Estado Mayor Central o Secretariado de las Farc entre 1978 y 2016.
Los exguerrilleros fueron vinculados por la Sala de Reconocimiento de Verdad y Determinación de los Hechos y Conductas de la JEP como comparecientes en el caso 007, denominado ‘reclutamiento y utilización de niños y niñas en el conflicto armado’.
En este primer momento fueron vinculados 37 exjefes de la guerrilla, y en la primera ronda de versiones libres –que irá del próximo 9 de diciembre al 30 de enero del 2020– fueron citados 14 excomandantes de las Farc.
En las versiones libres los exguerrilleros tendrán la oportunidad de responder a lo que dicen los informes revisados por la JEP y de hacer aportes tempranos a la verdad.
Según lo dispuso esa justicia transicional, los primeros en ser citados serán quienes hayan integrado el Secretariado entre 1978 y 2007, periodo en el que se realizaron las conferencias VI, VII, VIII y IX y los Plenos del Estado Mayor Central de 1997 y 2000, “y por lo tanto estuvieron en la posibilidad real de influir en la toma de decisiones relacionadas con el reclutamiento, el régimen de vida y disciplinario, las sanciones y las instancias de control a las políticas diseñadas por los mandos de la antigua guerrilla”, dice la JEP en el auto que citó a los exguerrilleros.
Así, la JEP citó en la primera ronda de versiones a:
Rodrigo Londoño Echeverry, ‘Timochenko’; Jesús Mario Arenas Rojas, ‘Marcos Urbano’; Abelardo Caicedo Colorado, ‘Solís Almeida’; Pastor Lisando Alape Lascarro; Juan Hermilo Cabrera Díaz, ‘Bertulfo’; Jaime Alberto Parra Rodríguez, ‘Mauricio Jaramillo’ o ‘el Médico’; Edgar López Gómez, ‘Pacho Chino’; Milton de Jesús Toncel Redondo, ‘Joaquín Gómez’ o ‘Usuariaga’; Pablo Catatumbo Torres Victoria; Julián Gallo Cubides, ‘Carlos Antonio Lozada’; Rodolfo Restrepo Ruiz, ‘Víctor Tirado’, ‘Víctor 34’ o ‘Rigoberto Lozano’; Martín Cruz Vega, ‘Rubín Morro’; Luis Óscar Úsuga Restrepo, ‘Isaías Trujillo’; y Jhon Jairo Hernández, alias ‘Fredy’ o ‘Picudo’.
En esta primera ronda el primero citado a versión libre es Rodrigo Londoño, alias Timochenko, quien hoy es el jefe del partido político Farc, surgido tras los acuerdos de paz. Está citado a dar su versión el próximo 9 de diciembre.
Hallazgos
Con este llamado a versiones libres la JEP quiere ahondar en conocer las decisiones que se tomaron desde las directivas de la exguerrilla sobre el reclutamiento de menores de edad, y sobre los delitos y violaciones que ocurrieron tras el reclutamiento.
Tras los documentos que hasta ahora ha analizado, la JEP tiene como hipótesis situaciones como que las Farc, para crecer como organización, definieron una política de reclutamiento que incluyó a menores de edad, dentro de esa política “se promovió, permitió o toleró el reclutamiento de niñas y niños; la vida en las filas implicó además que los menores de edad reclutados sufrieran castigos crueles, inhumanos y degradantes, tortura, fusilamiento y desaparición de personas, así como hechos de violencia sexual como la anticoncepción forzada, el aborto forzado y el carnal violento”.
Se promovió, permitió o toleró el reclutamiento de niñas y niños; la vida en las filas implicó además que los menores de edad reclutados sufrieran castigos crueles, así como hechos de violencia sexual
El auto continúa diciendo que parte de las hipótesis es que fue la cúpula de las Farc la que definió esas políticas y “promovió, permitió o al menos toleró el reclutamiento de menores de edad y otras victimizaciones relacionadas, además de que no tomó correctivos ante la ocurrencia de estos hechos ni medidas para evitar su previsible ocurrencia”.
Otras situaciones que ha podido reconstruir la JEP a partir de los informes que han obtenido es que desde 1997 se presentó en las filas de las Farc una tendencia creciente de reclutamiento de menores, que se mantuvo más o menos hasta el 2011, con un pico en 2012 y un importante descenso desde 2015.
Duras cifras
Según la JEP, durante ese periodo han identificado por lo menos a 471 víctimas indígenas de reclutamiento y a 413 afrodescendientes víctimas de esa conducta.
Además, al revisar los relatos recogidos por el Programa de Atención Humanitaria al Desmovilizado, la JEP encontró al menos 48 hechos individuales de víctimas de aborto forzado, y en bases de datos de la Fiscalía, se registraron al menos 55 hechos de violencia sexual en la que las víctimas fueron niñas entre los 7 y los 17 años.
En bases de datos de computadores del Bloque Oriental de la exguerrilla, en documentos nombrados como ‘Hojas de vida guerrilleras’, la JEP encontró que hay 286 registros de personas que ingresaron al grupo armado siendo menores de edad, de ese grupo, se registra que 60 murieron fusilados después de consejos de guerra por cometer alguna infracción a los reglamentos de la guerrilla, mientras que 8 se suicidaron.
Para la JEP, “esto evidencia que hubo una práctica de aplicar la pena de muerte a menores de edad como respuesta a infracciones a las normas de la guerrilla (…) y que posiblemente en las filas guerrilleras existían condiciones que impulsaron a algunos menores de edad a atentar contra su propia vida”.
Hubo una práctica de aplicar la pena de muerte a menores de edad (…) posiblemente en las filas guerrilleras existían condiciones que impulsaron a algunos menores a atentar contra su propia vida
En cuanto a violación de derechos sexuales y reproductivos, en informes presentados a la JEP se narra que la utilización de dispositivos intrauterinos de anticoncepción era obligatorio, sin importar la edad de las mujeres o niñas, ni su consentimiento o las consecuencias que eso tuviera en su salud. Y, se cuenta con testimonios de que debido a la prohibición de la maternidad, cuando una niña quedaba embarazada la obligaban a abortar.
También fueron citados a versión libre los exintegrantes de la Columna Móvil Arturo Ruiz que ostentaron cargos de mando en esa columna, creada durante las negociaciones de paz con el gobierno de Andrés Pastrana, y conformada por una importante cantidad de niños y niñas.
La columna fue enviada desde Meta hacia el Magdalena Medio para reforzar a las estructuras de las Farc que estaban siendo golpeadas por el paramilitarismo. En el camino hubo enfrentamientos con la Fuerza Pública y tras un mes de lucha, la Columna fue disuelta parcialmente. De las 94 bajas de esa columna por parte del Ejército, 19 eran menores de edad; mientras que 51 niños y niñas entre los 12 y los 17 años fueron capturados o se rindieron.
JUSTICIA