Corea del Sur: renuncia el jefe de seguridad del presidente antes de nuevo intento de arresto

El jefe de seguridad del presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, dimitió este viernes, en vísperas de que las autoridades intenten arrestar de nuevo al mandatario, una decisión que se cree que podría facilitar la detención.

El presidente interino Choi Sang-mok aceptó a su vez la dimisión de Park Chong-jun, jefe del Servicio de Seguridad Presidencial (PSS), y pidió consenso a los dos principales partidos del país para resolver el actual conflicto que existe entre el equipo que investiga a Yoon por su fallida declaración de la ley marcial en diciembre y el aparato de seguridad del mandatario.

(Le recomendamos: ¿Se fugó el presidente de Corea del Sur? Esto es lo que se sabe de su paradero en medio de la orden de captura)

En un comunicado, Choi consideró que no existe un marco legal para resolver la disputa entre el PSS y la Oficina para la Investigación de Casos de Corrupción para Altos Funcionarios (CIO), que se encararon durante horas el pasado viernes cuando el cuerpo que protege al presidente se negó a permitir el a la residencia de Yoon para que fuera arrestado.

Yoon y aquellos que le apoyan, desde sus abogados a del conservador y gobernante Partido del Poder Popular (PPP), insisten en que tanto la CIO como el juzgado que expidió y después prolongó la orden de arresto temporal contra el presidente carecen en realidad de jurisdicción sobre el caso.

Consideran que sería la Fiscalía la que debería investigar a Yoon por supuesta insurrección y por lo tanto tachan toda la campaña de "ilegal" y han vuelto a solicitar la anulación de la orden de arresto y una aclaración sobre competencias, esta vez al Tribunal Constitucional.

Choi pidió hoy un acuerdo en el Parlamento entre el opositor y liberal Partido Democrático (PD) y el PPP, para aprobar en el Parlamento que establezca un comité de investigación unificado que solvente los choques entre el resto de autoridades y la CIO, ente creado en 2021 por el anterior Gobierno liberal para recortar poderes a la Fiscalía, que encabezaba entonces el propio Yoon Suk-yeol, que dimitiría poco después para postularse como candidato conservador.

(Siga leyendo: Presidente surcoreano testificará en su juicio ante el Constitucional, según su abogado)

Mientras, se espera que el CIO encabece en cualquier momento una nueva operación con la policía, que podría desplegar unos 1.000 agentes, para tratar de apresar al presidente.

En caso de que logren arrestar a Yoon, los investigadores disponen de 48 horas para interrogar a Yoon e incluso pueden solicitar una orden para prolongar la detención si lo creen necesario.

La Fiscalía surcoreana acusó hoy formalmente a un controvertido excomandante de inteligencia militar por un delito de insurrección y abuso de poder en relación a su presunta participación en el intento fallido de instaurar la ley marcial el mes pasado diciembre por parte del presidente, Yoon Suk-yeol.

Los fiscales acusan a Noh Sang-won de discutir planes para implementar y gestionar la ley marcial con exoficiales de inteligencia militar y con otros mandos militares aún en ejercicio, entre ellos Moon Sang-ho, que en diciembre ocupaba precisamente el cargo de comandante de inteligencia militar que él ostentó también en su momento.

(Además: Corte desestima la anulación de la orden para detener a Yoon Suk-yeol por la ley marcial)

También consideran probado que ordenó a oficiales de inteligencia hacerse con el control de la sede de la Comisión Electoral Nacional (NEC) y arrestar y confinar a sus empleados para probar las acusaciones infundadas de que el organismo manipuló los resultados de las elecciones legislativas del pasado abril, en las que partido de Yoon fue duramente castigado y la oposición reforzó su control del Parlamento.

Noh es una figura muy controvertida dentro de la trama de la ley marcial, ya que fue expulsado de su cargo de comandante de inteligencia militar en 2018 tras ser condenado por acosar sexualmente de una subordinada.

(Le puede interesar: Ocho heridos en un ataque con martillo en un campus universitario de Tokio tras no integrar a la presunta atacante en un grupo de estudio)

Desde entonces, los investigadores creen que vivió y trabajó en una consulta de videntes en Ansan, ciudad dormitorio al suroeste de Seúl y que consultó en numerosas ocasiones a una conocida adivina sobre temas relacionados con la cúpula política y militar del país.

En ese establecimiento la Policía encontró un diario suyo en el que había anotaciones que indicaban aparentes planes para provocar a Corea del Norte y justificar así la ley marcial.

Más allá de su estrafalaria conexión con las creencias del chamanismo tradicional coreano, Noh también copó los titulares tras revelar los investigadores que se reunió tanto el 1 como el 3 de diciembre, día en que Yoon declaró la ley marcial, con Moon Sang-ho y otros oficiales y exoficiales en una conocida franquicia de hamburguesas en Ansan aparentemente para discutir detalles sobre el estado de excepción.

(Más: Corea del Sur investiga si muro con el que chocó el avión cumplía normas tras tragedia mortal)