La Unión Europea (UE) condenó este viernes la ejecución de tres personas en Irán y pidió a ese país que ponga punto final a la "práctica condenable" de imponer y aplicar la pena de muerte a personas que han participado de protestas.
"Hoy (este viernes), Majid Kazemi, Saeed Yaghoubi y Saleh Mirashemi fueron ejecutados tras ser detenidos y condenados a muerte en relación con las recientes protestas en Irán. La UE condena estas ejecuciones en los términos más enérgicos posibles", apuntó en un comunicado la oficina del jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
En su nota, la oficina de Borrell instó a las autoridades iraníes "que se abstengan de aplicar la pena de muerte y de llevar a cabo futuras ejecuciones, y que sigan una política coherente hacia la abolición total de la pena de muerte".
"La UE reitera su oposición firme y de principios al uso de la pena capital en todo momento y en todas las circunstancias. La pena de muerte es un castigo cruel e inhumano", señaló el comunicado.
Las ejecuciones de estos hombres hoy aumenta nuestras preocupaciones de que las autoridades iraníes siguen teniendo poco respeto del derecho internacional.
Varios expertos de la ONU en derechos humanos también rechazaron las ejecuciones. Según las informaciones recibidas por esos expertos de Naciones Unidas, el proceso judicial no fue justo y se utilizó la tortura para obligar a los acusados a confesar.
“Las ejecuciones de estos hombres hoy aumenta nuestras preocupaciones de que las autoridades iraníes siguen teniendo poco respeto del derecho internacional. La pena de muerte ha sido aplicada tras un juicio que no ha cumplido los estándares internacionales de la justicia y el debido proceso”, señalaron en un comunicado conjunto el relator especial de Naciones Unidas sobre Irán, Javaid Rehman; la relatora sobre la independencia de jueces, Margaret Satterthwaite, y el relator sobre ejecuciones extrajudiciales y sumarias, Morris Tidball-Binz.
Fuentes oficiales iraníes, en tanto, aseguraron que los tres condenados habían sido responsables por efectuar disparos durante las protestas, que costaron la vida a tres agentes de seguridad.
Irán se vio sacudido por una ola de protestas tras la muerte de la joven Masha Amini en septiembre de 2022, cuando se encontraba bajo custodia policial por haber violado presuntamente el estricto código de vestimenta impuesto a las mujeres, que incluye el uso del velo.
AFP