Editorial

Fue migrante, lo deportaron hace 37 años y ahora quiere reencontrarse con su hermana en Texas

El hombre vivió en la calle gracias a sus dibujos hasta que las redes sociales lo salvaron.

Don Baldemar Veliz Cerda quiere reencontrarse con su hermana en Texas tras más de 35 años de separación. Foto: Instagram @donbaldemar

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Tomas Peiro

REDACTOR30.01.2025 11:03 Actualizado: 02.02.2025 09:00

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Esta es la historia de Baldemar Veliz Cerda, un dibujante de 78 años que, tras haber sido deportado de Estados Unidos hace 37 años, ahora quiere reencontrarse con su hermana en Texas.

"Quiero irme pa’ Houston, Texas, a ver a mi hermana. Voy para 37 años que no la veo", dijo Veliz Cerda en una entrevista que le brindó a Telemundo.

En 1987, Veliz Cerda fue deportado de Estados Unidos tras vivir dos décadas en Texas. Su trabajo en carpintería, construcción y jardinería le permitía ganarse la vida dignamente, pero la falta de documentación legal lo llevó a ser expulsado sin oportunidad de despedirse de su familia.

Al regresar a México, se encontró con un país que le era ajeno. La soledad y la falta de recursos lo llevaron a vivir en las calles de Ciudad de México durante más de una década, sobreviviendo gracias a la venta de sus dibujos. "Aquí en la capital todo es más carito, por eso me tuve que quedar viviendo en las calles mucho tiempo", explicó.

Durante la pandemia, su historia cobró relevancia cuando la diseñadora gráfica Tania Gómez lo descubrió en el Paseo de la Reforma y compartió su historia en redes sociales. "Lo que me llamó la atención fueron los colores, los felinos, era un artista en la calle", recordó Gómez.

La respuesta fue inmediata, miles de personas lo apoyaron con donaciones, permitiéndole dejar las calles y dedicarse a su pasión. Desde entonces, participó en más de 10 exposiciones y consolidó su estilo dentro del arte naíf, con influencias de maestros como Diego Rivera y Miguel Ángel.

Pero más allá de su carrera artística, las redes le devolvieron el o con su hermana Anastasia. "Un día estábamos viendo noticias y hubo un reportaje sobre un señor que estaba en una plaza de México y que dormía en las calles. Le puse atención y, cuando lo vi, era mi hermano", contó Anastasia, de 82 años. El reencuentro virtual fue emotivo, pero para Veliz Cerda, el sueño de volver a verla en persona sigue pendiente.

Esta semana, su solicitud de visa para viajar a Estados Unidos fue rechazada, pero él no pierde la esperanza. "Quiero darle las gracias porque comoquiera estuve platicando con ellos", dijo con resignación.

En seis meses volverá a intentarlo. Mientras tanto, seguirá dibujando, con la esperanza de que sus trazos lo lleven de vuelta a Texas, donde su hermana lo espera después de casi cuatro décadas de separación.

La compleja y dura situación de los deportados en México

Casos como el de Veliz Cerda son solo el reflejo de una problemática mayor. En México, la separación familiar y la falta de apoyo a las personas deportadas son un grave problema social.

"Aunque hay planes del Gobierno, eso no basta. Hay que hacer políticas públicas de reinserción porque el tema de separación familiar, la soledad, son factores que impactan la salud mental", señaló Maggie Loredo, coordinadora del Instituto de Investigación para las Movilidades Humanas, en diálogo con Telemundo.

Según cifras oficiales, solo durante la primera semana de la presidencia de Donald Trump, México recibió más de 4.000 migrantes deportados.

"Muchos deportados terminan en las calles y son invisibilizados", advirtió Loredo. Investigaciones revelaron que las personas expulsadas de Estados Unidos enfrentan dificultades de reinserción, incluyendo escasez de oportunidades laborales y redes de apoyo.

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