SEÑOR DIRECTOR:
A escasos nueve meses de iniciado este mandato se genera un quiebre en la gobernabilidad, pues se van sumando eventos desafortunados:
El anuncio de ceses bilaterales, desvirtuados a los pocos días por los actores violentos; las afirmaciones del Presidente sobre que la ‘paz total’ es un invento de los medios de comunicación; respuestas desatinadas al Eln y las disidencias de las Farc; desconfianza dentro del gabinete ministerial ante posiciones técnicas; enfrentamientos con el Poder Judicial; invitaciones al pueblo para que esté en constante movilización; interferencias en decisiones de otros Estados; enfrentamientos con los partidos; mensajes permanentes por las redes sociales que generan zozobra y desconfianza; y finalmente, escándalos relacionados con actuaciones de personas cercanas al jefe del Estado.
Ahora más que nunca es necesario un momento de reflexión. La campaña acabó al ser elegido Petro como presidente, y desde la posesión asumió el reto de gobernar para todos los colombianos con un alto nivel de exigencia frente a la propuesta plasmada en el Plan de Desarrollo, que se espera genere la transformación anunciada. Muy respetuosamente, señor Presidente, la esperanza de los colombianos en el cambio no puede perderse en tan poco tiempo.
Gustavo A. Camelo
Realidades más urgentes
SEÑOR DIRECTOR:
Mientras la miseria sigue latente en diferentes clases sociales, mientras las bandas criminales azotan algunos departamentos, mientras nos acercamos a un espantoso verano, y mientras las reformas son presentadas por el Ejecutivo en búsqueda de mejorar la calidad de vida de la población marginada, impávidos vemos un pugilato entre los altos funcionarios en torno a asuntos de menor importancia para la ciudadanía, que deberían ventilarse únicamente a nivel judicial. Pero, como se aproximan las elecciones, los políticos acuden a cualquier pretexto para conseguir altas posiciones, sin importarles un comino la suerte del país. Desafortunadamente, cada quien da de lo que tiene.
Héctor Bruno Fernández Gómez
Redirigir el rumbo
SEÑOR DIRECTOR:
Los colombianos nos hemos ido acostumbrando a leer o a escuchar diariamente noticias cada vez peores que incluyen, la gran mayoría de ellas, al presidente Petro o a su equipo de trabajo. Esto genera una mala imagen, que fue confirmada por los tristes resultados que mostró la última encuesta Invamer: el 70,7 % de los entrevistados consideran que “Colombia va por mal camino”; el 12,6 % cree que el principal problema del país es el Presidente/Gobierno, y el 78 % considera que el cambio anunciado es solo para empeorar; el 60,9 % está en desacuerdo con las reformas del Presidente, y al 61,8 % no le gusta la reforma de la salud.
Además, la inseguridad que se presenta en varias zonas del país y que dificulta las actividades de exploración llevó a que cuatro compañías mineras tomaran la decisión de parar sus operaciones y salir del país. A lo que se le añade la incertidumbre actual con respecto a la exploración petrolera y la seguridad energética. Entonces, ¿que nos espera en los tres años que faltan?
David Guillermo Puyana Silva