SEÑOR DIRECTOR:
El caos que se vive en los aeropuertos por parte de los pasajeros de Viva Air que han quedado varados, demuestra que se trata de una canalla maniobra de dicha aerolínea para presionar al Gobierno en búsqueda de la autorización de integración con Avianca, que ha venido tramitando desde hace varios meses. Es constreñimiento poner a sus clientes como mampara para lograrlo. Lo anterior queda demostrado al constatar que la empresa vendió pasajes incluso horas más tarde de haber declarado el cese de actividades.
Lo que necesitaban era mayor número de personas reclamando furiosas en los aeropuertos para así presionar al gobierno y lograr su propósito.
Urge que las autoridades penales intervengan y las de otro orden frenen tan aberrante situación.
Héctor-Bruno Fernández Gómez
Lo privado y lo público
SEÑOR DIRECTOR:
Quienes son funcionarios del Estado no deben exponer asuntos privados públicamente, como un asunto de respeto. Lo anterior lo decimos ante la penosa y reprochable declaración de dos del Congreso, quienes comentaron que consumían diariamente marihuana. Se sabe que en Colombia, y en el mundo, son muchas las personas que consumen drogas, pero no es procedente ni ejemplarizante comunicarlo como funcionario. A los representantes en el Congreso que acostumbran hacer esta clase de comentarios personales es bueno recomendarlos diferenciar sus asuntos privados de lo público. Estos procedimientos no son buen ejemplo ni aporta a la comunidad en general y mucho menos a las nuevas generaciones.
Jorge Giraldo Acevedo
Alerta ante los incendios
SEÑOR DIRECTOR:
Como siempre por estas épocas vienen los incendios forestales, que inclusive afectan el aire de las ciudades como Bogotá, donde ya se nos pide volver al tapabocas. Esta prenda debería quedarse para siempre, especialmente ser requisito para el trasporte público, donde circulan los virus.
Sobre los incendios, ojalá las autoridades, las alcaldías, la policía logren prevenir. Un descuido, una colilla, un paseo con hoguera pueden causar irreparables daños. Ahora, ya se sabe que a veces también manos criminales hacen fuego en las mejores tierras. No se conoce el daño, muchas veces a zonas de reserva forestal. Defenderlos es primordial.
José Francisco Piñeres
No se salva ni el perro
SEÑOR DIRECTOR:
Aunque suene absurdo, podemos decir con certeza que hoy en día ni siquiera los animales están exentos de la delincuencia. Más allá del delito de robo de mascotas para su posterior venta ilegal, es increíble que, como ya se vio en Bolivia y Ecuador, los ladrones quieran ahora atentar contra ellos para robarse sus casitas, donde los animales pueden descansar y dormir.
Lo que otrora podría sonar a escena de comedia burda, se ha convertido en una realidad, que desafortunadamente nos muestra que de esta época decadente no se salva ni el perro.
Mauricio Vásquez Rincón