Aerocafé, una obra importante

No se entiende por qué algunos ciudadanos quieren torpedear Aerocafé, que sin duda será una magnífica obra que le abrirá a los turistas del mundo el poder venir, con pasajes competitivos, a toda la zona cafetera del Gran Caldas: Quindío, Risaralda y Caldas.

El presidente Petro debe solicitar ‘cartilla’ para que le expliquen las poderosas bondades que va a traer dicho aeródromo. La discusión no es de lo que quieran las élites, es de fomento del desarrollo económico a la luz de la descentralización.

Sea este el momento para decir que Manizales tiene un gran cerebro para la ciencia y tecnología, como es su Sistema Universitario, que tiene todas las carreras profesionales y posgrados de alta categoría, asunto que también influye en su proyección.

Aerocafé no es proyecto para llevar a consulta popular. Sería el acabose.

En estas turbulencias gubernamentales, algo que debe estar en la mira de los dirigentes es combatir el desempleo. Esto se consigue apoyando y estimulando al que coloca sus ahorros o su patrimonio para crearlo: una tienda de barrio, panadería, papelería, fábrica, industria, empresa de servicios tecnológicos, el agricultor que siembre - en su parcela, fanegadas o grandes cultivos-, así como la inversión extranjera en todas las áreas. Hacia allá deben estar dirigidos todos los estímulos o excepciones, pues serán ellos los que finalmente harán crecer nuestra economía y, por ende, el bienestar de la mayor parte de la comunidad. También es una forma de aumentar el recaudo.

Es lo contrario a creer que todo se soluciona con subsidios y más subsidios, pues su fuente generadora se agota, y al final nos asfixiamos todos.

Imposible desplazarse como peatón o mediante cualquier medio de transporte por la cantidad de obras en la ciudad. Además del peligro de tanta moto y bicimoto, pues muchos de ellos no respetan las señales y, por supuesto, la vida de los demás. Pasan por donde quieren sin ley.

Que sea esto un llamado a las autoridades competentes, que deben prevenir en lugar de lamentar. ¿Qué cuesta hacer las cosas bien?

Preocupan las declaraciones de la ministra de Minas y Energía, la filósofa Irene Vélez. Algunos de los temas que hoy se debaten en esa cartera tienen fuerte incidencia inflacionaria: energía y combustibles. El riesgo de un manejo equivocado en asuntos tan sensibles podría afectar seriamente la inflación, que hoy supera los dos dígitos.

Se requiere, de parte de su cabeza, el conocimiento de un sector que no ite decisiones ambivalentes o desacertadas.

Bogotá