La Comisión Primera de la Cámara de Representantes aprobó este martes un proyecto de ley el cual pretende que el retiro del preservativo sin consentimiento durante las relaciones sexuales sea parte del delito se acoso sexual.
La idea de esta iniciativa es que quien realice carnal tras retirar de manera consciente un condón o preservativo sin el consentimiento de la otra personas deberá pagar una pena entre dos y cuatro años de prisión.
"Adiciónese el artículo 210-B a la Ley 599 de 2000, el cual quedará así: Artículo 210-B. Abuso de la confianza sexual. El que durante la relación sexual, sin violencia o intimidación y sin que medie consentimiento, realice actos que atenten contra la libertad sexual, incluyendo el retiro de la barrera de protección sexual, incurrirá en prisión de dos (2) a cuatro (4) años", dice la ponencia.
Además, el documento señala que los medios de comunicación podrán crear campañas de difusión para "generar consciencia sobre el carácter delictivo de la práctica a la que hace referencia la presente ley y educar sobre los mecanismos de denuncia y reparación".
Es un mecanismo, una herramienta para los jueces. Pero, sobre todo, para aquellas víctimas que no tienen cómo defenderse y cómo denunciar este abuso que hoy en día se ha vuelto una práctica recurrente
"El legislador quiere sancionar aquellas conductas que sean abusivas de la confianza sexual (...). Esta conducta será sancionada en nuestro país de manera penal. En otros países han avanzado de manera diferente y han detectado que esto puede ser una especie de violación. El tema es que en Colombia, la violación depende del carnal violento. En estas circunstancias no existe dicho hecho, por lo que es muy difícil sancionarla", explicó el representante liberal Julián Peinado, autor de la iniciativa.
"Es un mecanismo, una herramienta para los jueces. Pero, sobre todo, para aquellas víctimas que no tienen cómo defenderse y cómo denunciar este abuso que hoy en día se ha vuelto una práctica recurrente", agregó el congresista.
Esta técnica es conocida como stealthing y en otros países ya es considerado un delito.
Según el proyecto, en nuestro país no existen estudios que permitan conocer a fondo la problemática, pero señala que en otros países sí se han llevado a cabo los análisis que dejan en evidencia la dimensión cualitativa.
"Un estudio realizado en 503 en mujeres de entre 21 y 30 años respecto a la resistencia del uso del condón concluyó que un 12 por ciento de las participantes habían sido víctimas de esta práctica. El estudio afirma, en todo caso, que los datos pueden subestimar la ocurrencia de esta práctica, considerando que el retiro del condón sin consentimiento puede ocurrir sin el conocimiento de la víctima (Davis, Stappenbeck, Masters & George; 2019)", se lee en el documento.
MATEO GARCÍA
REDACCIÓN POLÍTICA