¿Qué riesgos puede generar no tener una buena salud bucodental durante el embarazo?

En Colombia, cuando una mujer queda en estado de embarazo, por obligación, debe asistir a una serie de controles para evitar complicaciones durante la gestación. Es así como tiene controles nutricionales, psicológicos, generales y, además, tres controles odontológicos obligatorios durante toda la etapa de gestación. Sin embargo, según explica la odontóloga y doctora en epidemiología clínica, Juliana Velosa, muchas de las mujeres no asisten a esos controles.

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Ese fue uno de los hallazgos que Velosa encontró en varias investigaciones que desarrolló para su doctorado, realizado en la Universidad Javeriana. Según los datos encontrados en uno de los estudios por la experta, y que recogen cifras del IV Estudio Nacional de Salud Bucal (realizado en 2014 y el más actualizado que hay en el país), el 89,9 por ciento de las mujeres embarazadas han tenido caries en algún momento, y en general la prevalencia de este daño dental en este grupo es de 59 por ciento. 

En otro de los estudios realizados, Velosa encontró que la periodontitis, una infección grave de las encías que puede llevar a la pérdida de las piezas dentales, de hueso y otras complicaciones de salud graves, tiene en las mujeres embarazadas una prevalencia del 37 por ciento según el criterio de medición de la Academia Americana de Periodoncia, pero si se usa el criterio de medición de la Federación Europea de Periodoncia esa prevalencia es de 41,2 por ciento.  

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Lo peor, explica, es que, según muestran los datos, en zonas rurales la prevalencia y los casos de estas enfermedades aumentan, dado que el a servicios odontológicos es más limitado para las mujeres. El problema es que las enfermedades bucales pueden generar problemas y afectaciones graves no solo a la mujer, sino también, al bebé. 

“Se ha encontrado que la periodontitis, como es un proceso muy inflamatorio, aumenta los niveles de concentración de un marcador inflamatorio que se llama la prostaglandina E2, que está claramente asociado con las contracciones uterinas. Ese marcador inflamatorio se produce naturalmente durante el proceso del parto. Pero si el mismo organismo lo está produciendo antes de tiempo, puede inducir un parto pretérmino”, señala Velosa. 

De acuerdo con las investigaciones de la experta, en muchos casos las mujeres deciden no acudir a los controles odontológicos por mitos relacionados con el embarazo, como que por cada hijo gestado se pierde un diente, o que las enfermedades bucales son normales porque el calcio de la mujer disminuye durante esta etapa. Al respecto, destaca la investigadora, estos no son más que invenciones de la cultura popular sin fundamento científico. 

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“Como parte de las investigaciones para mi doctorado realicé encuestas en Cundinamarca, Boyacá y Cauca, y uno de los mitos es que el bebé les roba el calcio, y al robarles el calcio se les caen los dientes. Cuando yo les preguntaba por eso me decían que sí, que el bebé les robaba el calcio y que por eso a ellas las suplementaban con calcio. Ahí hay unos mitos y creencias que se han pasado de generación en generación y que nosotros como odontólogos no hemos sido muy claros en explicar que eso no es verdad”, resalta Velosa.  

Pero además de los mitos, otro problema que encontró la investigadora fue el ámbito social, donde evidenció que en muchos casos, sobre todo en zonas rurales, las mujeres no asisten al odontólogo por quedarse realizando las labores del hogar. “Las gestantes de Boyacá y las de Cauca me dijeron que no trabajaban, y que no iban al odontólogo porque sus esposos preferían que se quedaran en la casa para que no les pasara nada. Allí el esposo o la pareja se vuelve muy importante porque al final termina afectando a la gestante”, agrega. 

En ese sentido, la mayor conclusión de los estudios liderados por Velosa es que es necesario “desmitificar” la asistencia de las gestantes a los controles odontológicos, pero también realizar pedagogía en temas bucales a las madres para que estas puedan transmitir ese conocimiento a sus hijos. 

De acuerdo con la Asociación Latinoaméricana de Odontopediatría (ALO), toda gestante debe recibir un examen de salud bucal al inicio de su embarazo (primer trimestre), donde se incluya una evaluación de la cavidad bucal para evaluar riesgo odontológico prenatal, consejos sobre higiene bucal, dieta saludable y cuidados preventivos.  

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Además, resaltan, es clave incentivar el autocuidado (cepillado dental, uso del hilo dental, enjuagues fluorados), junto al control profesional (eliminación de sarro), con el objetivo de disminuir la gingivitis y promover la remineralización. 

“Es importante valorizar a la gestante dentro de grupos con mayor o menor riesgo de desarrollar caries, para facilitar la toma de decisión clínica, ya que esto permitirá el desarrollo de actividades preventivas o curativas específicas y así mantener la salud bucal de las mismas (disminuyendo la carga bacteriana bucal), guiar la toma de decisiones durante el plan de tratamiento y determinar el planeamiento de las citas de controles”, agregan 

EDWIN CAICEDO | REDACTOR UNIDAD DE SALUD

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