Ejercicios para fortalecer el cerebro y combatir la mala memoria

El entrenamiento físico pareciera servir exclusivamente para fortalecer los músculos de los brazos, el abdomen o las piernas, pero algunos órganos, como el cerebro, también necesitan ejercitarse con el fin de mantener o mejorar la salud mental, aspecto que cada día se vuelve más importante de tratar.

En un estudio reciente, neurólogos de la Universidad de Salud y Ciencia de Oregón (EE. UU.) comprobaron que los ejercicios físicos mejora las funciones del cerebro, como la capacidad de aprendizaje y la memoria. Según reporta el portal de la universidad, los científicos midieron la respuesta del cerebro en ratones sedentarios que corrieron por cortos períodos sobre ruedas y unos pocos kilómetros en dos horas.

Observaron que esos intervalos de ejercicios (equivalentes en humanos a un juego de baloncesto semanal o a 4.000 pasos diarios), mejoraban el trabajo de un gen que ayuda a establecer conexiones entre neuronas en el hipocampo, la región del cerebro que se asocia con la formación de la memoria.

Este estudio, publicado en la revista eLife, concluyó que el gen Mtss1L, se activa con breves ejercicios y promueve pequeños crecimientos en las neuronas conocidas como espinas dendríticas, donde se produce la sinapsis. Concluyó que una tanda aguda de ejercicio es suficiente para preparar al cerebro para el aprendizaje.

Esta investigación se une a otros estudios que ya han comprobado que el ejercicio físico mejora la capacidad de concentración, aumenta la flexibilidad cognitiva, mejora la memoria a largo plazo, alivia el estrés y reduce la ansiedad, y frena el envejecimiento cerebral.

Además de la actividad física, otros aliados del cerebro son ejercicios mentales como que hacer sudokus, entrenar la memoria visual, repasar las tareas diarias, hacer mapas mentales y cambiar de lateralidad (realizar tareas con la mano contraria a la habitual). Actividades que sirven para mantener el cerebro en forma, y que se pueden hacer en casa.

Según Rodrigo Córdoba, jefe del Departamento de Psiquiatría de la Universidad del Rosario, “a medida que las personas puedan asumir los ejercicios, entenderlos y ponerlos en práctica, generan formas de comportamiento que contribuyen a la salud mental”.

Sumado a esas sencillas rutinas caseras, una nueva tendencia para tener una buena salud mental es el ‘neurofitness’. El neurólogo Gustavo Castro explica que este programa de entrenamiento “no es una especialidad de la neurología, sino que son métodos que se pueden utilizar para tratar el déficit de atención, la mala memoria o los trastornos del sueño”.

En esta técnica, el primer paso es hacer un mapeo cerebral y análisis de los patrones de actividad eléctrica cerebral. Estos datos son recopilados por máquinas que graban y escanean su funcionamiento.

Esa información genera mapas de calor e identifica las zonas que deberían ser trabajadas. Algunos de los ejercicios son realización de juegos matemáticos, en los que se hace un seguimiento de las respuestas en tiempo real; actividades antiestrés, o el uso de unas gafas que generan pulsaciones de luz de diferentes intensidades y audífonos que emiten sonidos relajantes, como el de las olas del mar.

En las sesiones se hace un seguimiento completo en el que, dependiendo del avance, la dificultad de los ejercicios aumenta o disminuye. Según Gabriel Roncallo, director científico del gimnasio Hard Body, hay dos áreas que pueden trabajarse. La primera es la relacionada con las facultades cognitivas, que trata la falta de atención, la memoria, la capacidad de rendimiento, la concentración y el aprendizaje; y la segunda es la emocional, que está relacionada con síntomas de ansiedad, depresión y estrés.

“La clave es hacer repeticiones con ejercicios mentales para mejoría de la capacidad funcional cerebral”, dice Castro.

KAREN N. MARTÍNEZ SARMIENTO

Escuela de Periodismo Multimedia EL TIEMPO

Twitter: @KMARRRS