La variante P.1 (B.1.1.28.1) del Sars-CoV-2, identificada por primera vez en diciembre en el estado de Amazonas, en Brasil, ya circula en el municipio de Tabatinga, fronterizo con Leticia, capital de la Amazonia colombiana, según confirmó un estudio del vecino país.
Esta investigación caracterizó las secuencias genómicas del Sars-CoV-2 que circulan en el estado del Amazonas desde noviembre hasta mediados de enero. En concreto, se secuenciaron 250 genomas, 177 de Manaos (capital del estado) y 73 del interior.
Además de Tabatinga, esta variante fue identificada en São Gabriel da Cachoeira, en la frontera con los departamentos de Guainía y Vaupés, describe el estudio, que, además, confirmó el 30 de diciembre un caso de reinfección, es decir, un ciudadano que ya había dado positivo y se contagió nuevamente pero con la variante P.1.
Se determinó que esta variante está presente en 11 municipios del Amazonas brasileño y pasó de estar en el 51 por ciento de las muestras analizadas en diciembre a 91 por ciento de las secuenciadas al 13 de enero.
Y si bien Colombia sigue su vigilancia genómica, seleccionando semanalmente lotes de muestras de PCR positivas en todos los departamentos, y hasta el momento no ha encontrado la variante P.1 ni otras que han llamado la atención del mundo, el ministro de Salud, Fernando Ruiz,
anunció este miércoles la suspensión de todos los vuelos desde y hacia el Brasil por un mes. La medida se inicia el próximo viernes a las cero horas
y busca contener la posible llegada al país de dicha variante vía aérea, afirmó el ministro, aunque no anunció medidas específicas en la frontera terrestre con Tabatinga.
A su vez, Martha Ospina, directora del Instituto Nacional de Salud (INS), afirmó que en los últimos días se ha acelerado el seguimiento a las pruebas en el Amazonas colombiano en busca de la P.1.
Ospina recuerda que en mediciones de anticuerpos la ciudad de Manaos había mostrado una seroprevalencia del 75 por ciento de la población. Sin embargo, presentó un notorio incremento de casos por tres hipótesis: que esta variante podría eludir la inmunidad que las personas habían desarrollado en el primer pico de la pandemia; que los pobladores ya perdieron los anticuerpos específicos que habían generado al infectarse; y que la seroprevalencia estuvo sobreestimada y realmente era menor.
Otras variantes que inquietan y que se están buscando activamente en el país son la británica (B.1.1.7), que prendió las alarmas en diciembre y se sugirió que es más transmisible porque tiene 17 mutaciones en el gen de la espícula que, al parecer, la hacen más eficiente con los receptores humanos que los virus que circulaban antes.
La variante B.1.1.7 ya se ha extendido rápidamente en el Reino Unido, Irlanda y Dinamarca y en muchos otros países, al punto de que los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) publicaron un modelo que sugiere que esta variante se convertirá en la predominante en la Unión Europea en marzo.
También preocupa la variante sudafricana (501Y.V2) porque sus mutaciones cambian la proteína de la superficie viral y reducen la eficacia de los anticuerpos que combaten el virus.
Adicionalmente, desde noviembre circula en California la variante 20C, que preocupa porque gran número de sus mutaciones son similares a la B1.1.1.7 del Reino Unido.
Sin embargo, Ospina aclara que no se puede afirmar que estas nuevas variantes sean responsables de los nuevos picos en varios países. “Todavía en el mundo no está claro cómo esos nuevos linajes van a afectar los casos y fallecimientos, o si van a cambiar el curso de la pandemia”, remató.
¿Qué hacer?
En todo caso, Ospina dice que, más allá de la variante circulante, las medidas de prevención recomendadas, como el buen uso del tapabocas, el lavado de manos y la distancia física, son medidas protectoras para evitar nuevas infecciones.
“El comportamiento humano sigue siendo la principal fuerza impulsora del resurgimiento del virus”, recuerda.
Además, si bien el virus no parece haberse vuelto resistente a las vacunas, la velocidad con que se están generando nuevas mutaciones hace pensar que llegará el momento y se requerirá ajuste en estos fármacos e, incluso, desarrollos de vacunas multivalentes que protejan contra diferentes variantes, concluye Ospina.
UNIDAD DE SALUD