China es, con razón, uno de los países con mayor afluencia anual de visitantes, dada su inmensa riqueza histórica y cultural. Además de la Gran Muralla, alberga atractivos enigmáticos y de belleza impresionante.
Si está pensando visitar ese país, tenga en cuenta estos tres imperdibles:
La Ciudad Prohibida de Beijing
La capital china, Pekín (Beijing), es de lejos uno de los destinos turísticos más populares de ese país; la milenaria ciudad no solo es un ícono de modernidad, sino que también alberga joyas culturales e históricas incomparables. Además de La Gran Muralla, esta ciudad alberga otros tesoros de incalculable valor, como la plaza de Tiananmén, el mausoleo de Mao Zedong y la impresionante Ciudad Prohibida.
Fue el centro del poder de las dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911), desde 1420 hasta 1912. El complejo recibió este nombre porque no se permitía a las personas corrientes el ingreso sin permisos especiales. Solo los cortesanos podían obtener una audiencia con el emperador. Cada año, en condiciones normales (antes de la pandemia), recibía en promedio siete millones de visitantes anuales.
X’ian y los guerreros de Terracota
La ciudad de X’iang es la capital de la provincia de Shaanxi. A unos 33 kilómetros fueron hallados los mundialmente famosos guerreros de terracota. Se trata de cerca de 8.000 figuras de tamaño real, de soldados y caballos, enterrados cerca del emperador de la Dinastía Qin, Qin Shi Huang, en 210 a 209 antes de Cristo.
El 2 de febrero de 1974, mientras se llevaban a cabo obras para el abastecimiento de agua, fue descubierto este ejército, enterrado en formación de batalla en tres fosos, a 1,5 kilómetros al oriente de la tumba del emperador. El complejo fue declarado Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en 1987.
El Gran Buda de Leshan, en Chengdu
La historia de esta ciudad capital de la provincia de Sichuan, se remonta al siglo IV antes de Cristo. Entre sus atractivos cuenta con dos imperdibles, que ameritan desplazarse hasta esta población: la visita a la famosa Base de Investigación Chengdu de Crianza de Pandas Gigantes, y la visita, a dos horas por carretera, al Gran Buda de Leshan, la estatua en piedra del Buda más grande del mundo.
Esculpido en el año 713 en un acantilado rocoso en el entorno natural del Monte Emei, una de las cuatro montañas sagradas del budismo en China, la figura mide 70 metros de alto y es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
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