Roberto Linguanotto es el pastelero considerado como el padre del tiramisú moderno, pues fue el cocinero que redescubrió y relanzó en la década del 60 el postre.
El pasado domingo 28 de julio se anunció la muerte de Linguanotto luego de enfrentar una larga enfermedad, según el medio italiano ADNKronos.
Según este mismo medio, Linguanotto inventó el tiramisú moderno cuando trabajaba en el reconocido restaurante Le Beccherie, el cual quedaba en el centro de Treviso, una ciudad de Italia.
El término tiramisú, en italiano ‘tiramesù’, traducido al español significa ‘tira de mí’. Este postre, hoy día un ícono en la industria gastronómica es en realidad una variante del zabaglione, un dulce hecho a base de ponche de huevo.
El pastelero inventó el tiramisú moderno por accidente. Según cuenta la revista gastronómica Taste Atlas, el cocinero se encontraba preparando helado de vainilla, cuando mezcló involuntariamente queso mascarpone con las yemas de huevo y azícar.
Curioso por esta esta mezcla cremosa, Linguanotto la probó “y la potencializó con capas de bizcocho de soletilla empapados en café”, comunicó la revista. Y, como toque final, esparció cacao en polvo. Así, junto con su esposa Alba Campeol, dio vida al emblemático postre.
El presidente de la región del Véneto, Luca Zaia, se pronunció ante el lamentable hecho: “Me uno a las condolencias por el fallecimiento de Roberto Linguanotto, que marcó un antes y un después en la pastelería. El tiramisú es hoy una excelencia culinaria reconocida en todo el mundo, y el mérito de tal éxito se debe también a su maestría como pastelero y a su voluntad de hacer único e inimitable nuestro manjar veneciano, llevando el Tiramisú a la vanguardia de los postres nacionales e internacionales".
LINDA DONADO RUDAS - ESCUELA DE PERIODISMO MULTIMEDIA EL TIEMPO
REDACCIÓN CULTURA