La menopausia impacta a las mujeres en diversas áreas, incluyendo la salud ósea.
Según la Dra. May Al-Araji, experta en salud de la mujer y medicina familiar en el Sistema de Salud de Mayo Clinic en Londres, es crucial mejorar la salud esquelética, especialmente durante la perimenopausia y después de la
menopausia.
Según Al-Araji, esta condición tiene un impacto multisistémico, por lo que puede afectar diversos aspectos de la salud de las mujeres, incluyendo la piel, el cabello, el cerebro, el corazón, otros órganos e incluso el sistema esquelético.
La doctora añade que aplicar presión sobre los huesos durante y después de esta etapa puede ayudar a aumentar la densidad ósea y reducir el riesgo de osteoporosis. “Se trata de resistencia”, explica Al-Araji.
Algunos ejercicios clave para fortalecer la salud ósea incluyen el uso de bandas de resistencia, entrenamiento con el peso propio del cuerpo y el levantamiento de pesas libres y en máquinas de musculación.
Según la Clínica Mayo, las mujeres que se acercan a la menopausia pueden mejorar su salud ósea adoptando otros hábitos como no fumar y seguir una dieta equilibrada, que incluya alimentos ricos en vitamina D.
Síntomas alarmantes
Síntomas preocupantes
Si se acerca a la perimenopausia o años posteriores a la menopausia, es importante estar atenta a las siguientes señales:
- Dolor ardiente en los huesos
- Ruptura de huesos con caídas simples
- Toma de medicamentos que suprimen su sistema inmunológico
- Uso de corticoides
- Historial familiar de osteoporosis
- Tener una enfermedad autoinmune