El entregar la hostia en la
misa católica
es una manera de representar el cuerpo de Jesucristo y entregarlo a los fieles para que lo coman y sean bendecidos por el espíritu santo.
Sin embargo, pocos saben del porqué se hace hasta práctica, de dónde viene y su origen dentro del cristianismo, por ello a continuación le explicaremos cuál es el origen de la entrega de la hostia en las ceremonias religiosas, según el portal ‘Holy Art’.
La hostia es una oblea de pan ázimo, hecha con harina de trigo que tiene una forma circular. El término hostia deriva de la palabra en latín hostia, que significa víctima sacrificial para una identidad divina, según el portal mencionado.
El pan de ázimo era el único pan que se consumía en la antigüedad por los seres humanos, el cual se producía mezclando agua y harina, cociéndose en piedra calientes o en cenizas.
El pueblo judío desde la antigüedad lo consideraba un alimento sagrado, ya que esto fue lo que los mantuvo a salvo desde que salieron del pueblo de Egipto bajo el liderazgo de Moisés, por la travesía que realizaron en medio del desierto para llegar a la tierra prometida por Dios, según la Biblia.
Por ello, el pan ázimo se utilizaba en la Fiesta de las Primicias, en la que la vieja levadura se botaba y se hacía una nueva para las nuevas cosechas, tal como indica el portal ‘Holy Art’.
Esta tradición fue recogida por los cristianos para seguir lo enseñado por Cristo, dándole un nuevo significado espiritual.
Fue el mismo Jesucristo quien creó una nueva forma de comunicarse con él, realizando el siguiente acto en la última cena con sus discípulos.
En esta bendijo el pan de ázimo y presentó a este como su propio cuerpo, esta fue la ceremonia que dejó instaurado por Jesús para recibirlo a él a través del pan como su propio cuerpo, según el Evangelio de San Lucas.
«También tomó pan y, después de dar gracias, lo partió, se lo dio y dijo: “Este pan es mi cuerpo, entregado por vosotros; haced esto en memoria de mí” » (Lucas 22-19).
«De la misma manera tomó la copa después de la cena, y dijo: “Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que es derramada por vosotros.”» (Lucas 22-20)
Esto dentro del cristianismo se llama Transubstanciación, que es la transformación del pan literalmente en el cuerpo de Cristo y el vino en la sangre del salvador, según la tradición cristiana.
Por ello, cada vez que se hace la misa, se considera un milagro porque se recibe el cuerpo de cristo, recordando la promesa de salvación hecha por Jesús.
En la manera actual, como se da la hostia se instauró en el año 554, hubo un consenso para que la hostia se hiciera más pequeña y redonda, ya que se entregaba pedazos grandes de masa, siendo poco práctico.
Mujeres que prepararon medio millón de hostias para el Papa
MIGUEL ANGEL RAMOS FORERO
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
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