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Noticia
Así pasé de dormir en andenes a dirigir fundación de rehabilitación: la historia de ex habitante de calle de Bogotá
Ferney Garzón pasó 15 años viviendo en la calle y 22 en el mundo del consumo de drogas.
En 2015, logró completar su rehabilitación y afirma que su vida ha cambiado por completo desde entonces.
Ferney Garzón pasó 23 años en la calle por el consumo de drogas. Desde 2015, está rehabilitado y ahora dirige la fundación: Casa Vida, donde ayuda a otros a salir de la calle. Foto: Cortesía de Ferney Garzón
"He intentado irme de la calle muchas veces y me ha sido difícil porque no hay un camino que seguir o una idea a la cual aferrarse y arrancar. Las derrotas personales son bastantes fuertes, entonces eso es lo que no nos deja avanzar o no nos deja ir", dice John, un habitante de la calle.
John y Johanna, dos habitantes de calle de la Av. Ciudad de Lima. John tiene 44 años y Johanna, 33. Foto:Juliana Cruz / El Tiempo
Así como él, Ferney Garzón conoce de primera mano como es vivir en la fría y dura Bogotá; pues hace 22 años, él también fue un habitante de calle. Entre cambuches, puentes, caños, residencias, pagadiarios y dormitorios transitorios; entre robar para consumir y pedir limosna, muchos otros como Ferney y John viven sus días y noches en una espiral sin salida.
Ferney Garzón fue habitante de calle por 22 años. El 7 de abril cumplió 10 años fuera de ellas. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
El último censo de habitantes de calle, realizado en 2024 por la Secretaría Distrital de Integración Social, estima que en Bogotá hay 10.478 habitantes de calle; un aumento del 10% respecto al último censo de 2017.
Quienes mayoritariamente viven en las calles son hombres entre los 29 y 49 años. No obstante, "el 21,3% de los habitantes de calle iniciaron su vida antes de los 18 años. Además, 4 de cada 10 llegaron a su condición por conflictos familiares”, indicó el estudio.
Desde Integración Social, se atiende y ofrecen servicios a la población en condición de calle. Foto:Secretaría Distrital de Integración Social
Los resultados también señalaron que el consumo de sustancias psicoactivas como el bazuco, continúan siendo el principal motivo para habitar la calle.
Otras sustancias como el alcohol y el cigarrillo, que son drogas lícitas, los inhalantes, la cocaína y la heroína también pueden consumirse.
El bazuco es de las sustancias más utilizadas y consumidas por las personas en condición de calle. Foto:iStock
La historia de Ferney en las calles comenzó cuando conoció las drogas por primera vez. En 1996, cuando tenía 16 años, probó la marihuana. Como él lo cuenta, todo inició como un consumo experimental, por pura curiosidad. Al año, la cambió por bazuco.
El consumo de sustancias y drogas en los habitantes de calle es una de las razones de su condición. Foto:Sergio Acero Yate / El Tiempo
“Consumía para vivir y vivía para consumir”, explicó. Al inicio conseguía el dinero mientras trabajaba para poder comprar drogas, después, empezó a sacar objetos de valor de su casa y cuando la adicción cada vez fue creciendo más, llegaba a robar apartamentos, personas e incluso carros.
No todos los habitantes de calle roban para vivir o consumir. Según las estadísticas, el reciclaje es su mayor fuente de ingresos (46,6%); seguida de la mendicidad (18,4%).
Pedro José y Antonio son dos habitantes que llevan décadas en la calle. Ambos son recicladores. Foto:Juliana Cruz / El Tiempo
Sumado al abuso de drogas, las reglas de su casa hicieron que optara por irse a la calle. Cansado de ellas y en medio de su rebeldía, Ferney solo podía pensar en su libertad. “Al principio fue duro porque era la única persona de mi familia que consumió sustancias, entonces para ellos fue difícil”.
La familia de Ferney lo acompañó durante su vida en la calle y siempre esperaron que se recuperara. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
Fue entonces así, como desde muy temprana edad, Ferney entró al mundo de la habitabilidad de calle.
“El pensamiento que yo tengo en este momento de haber habitado las calles es dolor y miseria”
La falta de empleo y oportunidades, adicciones, abandono, violencia, dificultades económicas, desplazamientos y demás circunstancias, llevan a algunos a elegir la calle como una opción de vida permanente o transitoria.
Ferney comenzó a vivir en la calle por su consumo de drogas cuando tenía apenas 17 años. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
Según expertos en el tema, otros factores que influyen son "el conflicto armado, la pobreza extrema, el olvido del Estado, la depresión, la pérdida económica, la separación con la pareja, la pérdida de un hijo...".
Durante 15 años, Ferney habitó las calles en soledad; 22, si sumamos las drogas. Su recorrido inició en el caño de Matatigres donde empezó su consumo, luego se fue 3 años al Cartucho y finalmente se estableció en el Bronx. "Tenía que sobrevivir como fuera, realmente fue una experiencia bien fuerte. Dormí en el andén más de 2.000 noches”.
Entre sus tantas anécdotas, una que recordó fue el día en que, debido a una úlcera varicosa, le debían quitar su pierna. Para ese entonces vivía en el Bronx. “Duré 3 años con unas heridas que me llegaban casi hasta el hueso, con la pierna podrida; botando materia y sangre todo el día. Eso fue lo más tortuoso que me pudo haber pasado porque realmente fue muy doloroso (...) Casi no podía salir, caminar, ni nada”.
Cuando vivió en el Bronx, Ferney cuenta que vivió mucho dolor, miseria y hambre. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
También contó que en varias ocasiones, cuando estuvo preso, sufrió de varios maltratos por parte de la policía; pues en dichas instalaciones, lo golpearon y abusaron de él. De igual manera, comentó que vivió de señalamientos y rechazos por parte de la sociedad.
El Cartucho y el Bronx: la antigua geografía de Ferney Garzón en Bogotá
Durante los años 70 hasta los 2000, El Cartucho y el cuadrante del Bronx fueron las zonas más pobladas por los habitantes de calle. Estos dos lugares fueron dos de los principales hogares de Ferney durante su paso por las vías de la ciudad.
El Bronx fue considerada una de las 'ollas' más grandes de venta de estupefacientes de Bogotá. Foto:Sergio Acero (CEET)
Ubicado en el actual Parque Tercer Milenio entre la carrera 10 y 12, el antiguo barrio Santa Inés, posteriormente conocido como El Cartucho, se convirtió en una de las zonas más deterioradas y temidas de la capital.
Así lucía el cartucho para finales de los años 90 y comienzos del 2000. Foto:León Peláez. Archivo / EL TIEMPO
Conocido por sus dinámicas de consumo de estupefacientes y el alojamiento de habitantes de calle y otros actores, en 1998, el entonces alcalde, Enrique Peñalosa, decidió demolerlo a cambio de construir el Parque Tercer Milenio, según narra el texto de 'En un lugar llamado El Cartucho'.
Antiguas calles del barrio Santa Inés, donde nació El Cartucho. Foto:ELTIEMPO
Para Ferney, su paso por las calles de este lugar fueron sus momentos más oscuros, pero también fueron consideradas por él como su “parche amañador", una zona de confort para el consumo y, ¿por qué no?, un lugar de vida. “Ahí decidí que lo que más me gustaba era la calle, las drogas y la delincuencia”.
Luego migró al Bronx, un bloque que quedaba a "las narices" de la Casa de Nariño, el Congreso y la Alcaldía de Bogotá. Estaba ubicada detrás de la Iglesia del Voto Nacional, a tan solo una cuadra de la Dirección de Reclutamiento del Ejército y a dos de la Policía Judicial y del Batallón Guardia Presidencial.
El Bronx también era conocido como 'La Caldera del Diablo', 'La Letra', 'La L' o 'El Horno'. Foto:CEET
Similar a otras adicciones, la habitabilidad en calle es un ciclo bastante difícil de romper y puede llegar a tener consecuencias en la salud mental, física y emocional de quien la vive.
Rehabilitación de condición de calle: "Quería ser una persona normal, quería aportarle a la sociedad"
Así como existen centros de rehabilitación para drogadictos y alcohólicos, también hay procesos para las personas en condición de calle. Y como todo, conlleva sus éxitos y derrotas.
Salir no es nada sencillo. De las miles de personas que inician un proceso de rehabilitación, ya sea bajo su propia voluntad o no, son pocas las que logran completarlo.
"Hay que entender que hay una enfermedad que se llama adicción, que es la que manipula el pensamiento y las emociones de las personas. Que el proceso sea fácil o difícil depende del individuo", explicó Ferney.
Ferney es el director de la Fundación Casa Vida para habitantes de calle con consumo de drogas. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
Sus valores y creencias de la calle los hacen creer que salir de este entorno es perder su esencia; es dejar atrás el mundo que conocen. Adaptarse al sistema, como ellos lo mencionan, no está en sus planes. Como explican los expertos: “La calle también es una opción de vida y es respetable”.
Antonio y Pedro son habitantes que llevan décadas en la calle. Dicen que jamás saldrían de ellas. Foto:Juliana Cruz / El Tiempo
Para Ferney, salir no fue nada fácil. A sus 21 años, entró en uno de sus tantos procesos de rehabilitación, motivado por su familia. Aunque intentaron ayudarlo, invirtiendo de su propio dinero y tiempo para darle una segunda oportunidad; Ferney no lograba completar el proceso y prefería estar consumiendo; algo que terminó por alejar a sus seres queridos.
"Creí que podía manejar mi adicción, pero me equivoqué y poco a poco perdí mi vida y mi familia", dijo. "La única persona que quedó al final fue mi hermana. El resto me apoyó luego de 5 años de rehabilitación".
Su hermana fue la única persona que no lo abandonó. Ella fue quién lo apoyó en su rehabilitación. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
Pasó por 30 fundaciones y centros de rehabilitación y solo logró completar 3 o 4 procesos. “Yo estuve como ciudadano habitante de calle en los programas que ofrece la Alcaldía. Mi ficha fue la 2675. Yo con ese número podía entrar a hogares y a programas de la Alcaldía”.
Cansado de vivir en las calles, decidió realizar un último proceso. “Quería ser una persona normal, quería aportarle a la sociedad; pero principalmente estaba motivado por el amor y la misericordia del Señor Jesucristo, quien fue el que salvó mi vida”.
Luego de rehabilitarse, Ferney obtuvo su diploma de bachiller y luego se casó con una cristiana. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
En 2015, completó su rehabilitación en la fundación de Lazos de Amor, donde obtuvo su grado de bachiller. Y dos años después se casó con su esposa, Alexandra.
El pasado 7 de abril, cumplió 10 años fuera de las calles del Bronx y el consumo. Como Ferney lo expresa, su vida ha cambiado por completo. Ahora es felizmente casado y es el director del Centro de Atención y Servicio en Adicciones Casa Vida, la cual fundó en 2019 “haciendo brigadas de amor con ciudadanos que habitan la calle”.
Ferney habla de sus 10 años sin drogas y fuera de la calle. Foto:CASA VIDA
Aunque el proyecto comenzó en el primer piso de la casa de su suegra, a día de hoy la fundación tiene dos hogares con 120 hombres que se encuentran internados en un proceso de recuperación.
Allí ofrecen múltiples servicios:
Validación del bachillerato.
Servicio de enfermería.
Convenio con el Sena.
Terapia ocupacional.
Taller de panadería y de costura.
Proyecto de vida.
Trabajo social.
Psiquiatría y psicología.
Acompañamiento espiritual.
Fundación Casa Vida, dirigida por Ferney, se enfoca en la rehabilitación de habitantes de calle. Foto:Facebook: Fundación Casa Vida
“Mientras hay vida, hay esperanza. ¡Ánimo, la recuperación sí es posible! Sí se puede salir de las drogas y las calles”, anima Ferney a aquellas personas que creen que la rehabilitación de la condición de calle no es posible.
En Casa Vida, se ayuda a los exhabitantes a salir de las calles desde diferentes aristas. Foto:Cortesía de Ferney Garzón
Si quiere arse con la fundación de Casa Vida, puede ingresar a su página de Facebook y escribir al o que se encuentra en la descripción.
Si conoce a alguien que es habitante de calle o está en riesgo de estarlo, Integración Social ofrece varias líneas atención:
Servicios transitorios: abordaje, autocuidado y hogares de paso.
Procesos permanentes: centros de alta dependencia y comunidades de vida (rehabilitación).
Para conocer la ubicación de los centros, diríjase al siguiente mapa y consulte cuáles son los centros de atención hay en Bogotá para esta población.