Día de Reyes en el barrio Egipto, una tradición de 109 años en Bogotá

La Fiesta de Reyes Magos y Epifanía es sagrada en el barrio Egipto. Cada año, los residentes de la comunidad se preparan para ver el espectáculo y disfrutar de todas las actividades. Y es que ya son 109 años los que completa esta tradición, pues la puesta en escena se inició en la época colonial y, desde esa fecha, no se deja de preparar el evento.

Lo más llamativo es, sin duda, la representación teatral del pesebre, que está acompañada con un carnaval. Además, las calles se llenan de juegos tradicionales, como la rana, que divierten a las familias y visitantes mientras degustan un platillo tradicional. Este año hay más de 150 emprendimientos locales participando.

Cada año esta fiesta está mejor organizada. Jeisson Camilo Muñoz Henao es cantor y sacristán de la iglesia Nuestra Señora de Egipto, fundada en 1558. Con 28 años de edad, es habitante del barrio Egipto y ha sido espectador y actor de la Fiesta de Reyes Magos y Epifanía desde su infancia. Él comparte el valor espiritual de esta celebración mientras termina con los preparativos. “Esta fiesta es muy importante para nosotros porque estamos recordando la historia de la llegada de los Reyes Magos a Belén a visitar al niño en el pesebre. Personajes que eran reyes y tenían un estatus alto vinieron a adorar a un niño humilde. Es un mensaje de humildad y sencillez material y espiritual”.

La celebración de la Fiesta de Reyes Magos fue declarada en el 2005 patrimonio cultural, y para Jeisson sigue vigente gracias a la espiritualidad y la cultura del barrio Egipto y de la localidad. “La Iglesia ha ayudado a reconocer la fiesta como patrimonio vivo”.

Daniel Rodríguez también es habitante del barrio Egipto e integrante de la junta de acción comunal. “Esta fiesta es muy importante porque confluyen muchas tradiciones, sabores, como los huesos de marrano y la chicha y no deja que se mueran las tradiciones populares de barrio”. Hoy, la alcaldía local de la Candelaria cierra la fiesta con el artista Bonny Cepeda a las ocho de la noche.

REDACCIÓN BOGOTÁ