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Investigación
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Los peligrosos nexos del Clan Azul de San Bernardo con los ‘Gancho Millos’, temibles delincuentes del extinto Bronx
Ocho personas fueron capturadas en un operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá.
Captura de cuatro mujeres y cuatro hombres integrantes del ‘Clan Azul’. Foto: Policía Metropolitana de Bogotá
En las entrañas del barrio San Bernardo, el pasado del antiguo Bronx aún respira a través de sus herederos. Lo que un día fue el epicentro del terror urbano, no desapareció con las demoliciones ni con las operaciones que lo desmantelaron. Mutó. Se camufló. Migró. Y una parte de ese legado oscuro, ahora conocido como el ‘Clan Azul’, reapareció en este sector, justo en el corazón de la capital, donde recientemente la detonación de varios artefactos explosivos ha sembrado de nuevo el terror.
Allí, bajo fachadas modestas y esquinas desgastadas por el tiempo, las autoridades descubrieron una red de microtráfico con tentáculos que se extendían como raíces podridas por varias cuadras del sector. Ocho personas fueron capturadas el pasado 28 de marzo en un operativo liderado por la Policía Metropolitana de Bogotá, lo que permitió abrir un boquete en el silencio que encubría una estructura criminal alimentada por el miedo, la necesidad y la impunidad.
Pero más allá de la droga, las canecas, las cápsulas de bazuco y las bolsas de marihuana que encontraron escondidas entre basureros y zonas verdes, lo que más inquieta es lo que hay detrás: una conexión directa con uno de los capítulos más violentos del hampa bogotana. El Clan Azul, según reveló una fuente a EL TIEMPO, no es un grupo nuevo ni improvisado. Son, en realidad, una línea de los, otrora, conocidos como ‘Gancho Millos’ del extinto Bronx. Cambiaron de nombre, pero no su objetivo.
El Clan Azul ocultabanla droga en carretillas, basuras y dentro de sus zapatos. Foto:Policía Metropolitana de Bogotá
El Clan Azul, según reveló una fuente a EL TIEMPO, no es un grupo nuevo ni improvisado. Son, en realidad, una línea de los, otrora, conocidos como ‘Gancho Millos’ del extinto Bronx.
Del Bronx a San Bernardo: una herencia de terror
‘Gancho Millos’ fue uno de los ganchos más temidos del Bronx. Su lógica era simple y brutal: lealtad o castigo. Quien rompiera sus reglas pagaba con sangre. Ahora, las autoridades sostienen que sus integrantes sobrevivieron al derrumbe del Bronx desplazándose unas cuantas cuadras, a San Bernardo, un barrio que desde hace años lucha contra la marginalidad y la creciente población de habitantes de calle.
de Clan Azul. Foto:Fiscalía General de la Nación
Alias 'Cucho' instrumentalizaba menores de edad, usaba a su propia sobrina para mover droga, y sometía a personas en condición de calle, a quienes convertía en piezas desechables del engranaje criminal.
En este nuevo escenario, bajo la coordinación de alias Wilson —identificado como José Wilson Mateus Morales, alias ‘Cucho’—, la organización resucitó su poder. Según la investigación, Wilson no solo era el cabecilla de la red, sino también el encargado de mantener las prácticas más oscuras del Bronx: instrumentalizaba menores de edad, usaba a su propia sobrina para mover droga, y sometía a personas en condición de calle, a quienes convertía en piezas desechables del engranaje criminal.
Imágenes del operativo. Foto:Policía Metropolitana de Bogotá
En un solo día, el Clan Azul podía vender hasta 3.000 dosis de bazuco. Eso equivale a más de 50 millones de pesos semanales, dinero con el que financiaban su seguridad privada —los llamados ‘seguros’ o ‘zayas’— y sobornaban o amedrentaban a cualquiera que osara interrumpir sus operaciones. Su territorio más férreo: la calle 3 entre carreras 10 y 13, una zona dominada por los ‘Venecos’, otro grupo criminal con el que pactaban o peleaban a muerte.
Roles marcados
La estructura criminal. Foto:Policía Metropolitana de Bogotá
La investigación permitió establecer los roles de cada capturado. Además de alias Cucho, están María Cristina Guerrero García, alias Cristina, quien sería la encargada de istrar puntos de venta; Carlos Sebastián González, alias Segovia; Alejandro Acosta Barboza, alias Gordo Alejandro; Darly Lizeth Roa Santamaría, alias Lizeth; Daniela Nirleidy Peñuela Navarro, alias Dani; Stiven Alejandro Forero Salinas, alias Stiven; y Olga Lucía Forero Salinas, alias Olga.
Cada uno cumplía una función específica: desde el almacenamiento hasta la dosificación, pasando por la distribución y la supervisión del territorio. Nada se movía sin el visto bueno del líder. La estructura era rígida, casi militar.
Los fiscales les imputaron los delitos de concierto para delinquir, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, y uso de menores en la comisión de delitos. Pese a las evidencias, ninguno aceptó cargos. Todos deberán enfrentar el proceso judicial desde prisión.
Una zona crítica, una amenaza latente
La caída del Clan Azul representa una afectación estructural al microtráfico en una de las zonas más críticas de Bogotá. San Bernardo, que se ha convertido en un nuevo epicentro del consumo y el expendio, vive sumido en una tormenta perfecta: pobreza, desplazamiento, drogadicción y poca presencia institucional. En ese contexto, los rezagos del Bronx encontraron terreno fértil para echar nuevas raíces.
El microtráfico está detrás del 37% de los homicidios en Bogotá. En lo que va del año, 14 habitantes de calle han sido asesinados, muchos de ellos por disputas territoriales o venganzas entre bandas.
Y los efectos no se limitan a la droga. Las autoridades advierten que el microtráfico está detrás del 37 % de los homicidios en Bogotá. En lo que va del año, 14 habitantes de calle han sido asesinados, muchos de ellos por disputas territoriales o venganzas entre bandas.
Los ataques con granadas, aunque menos frecuentes, también son una amenaza latente. Por eso, este golpe al Clan Azul no solo busca frenar el tráfico, sino cortar una cadena de violencia que sigue tiñendo de sangre las calles del centro.
La Policía no descarta nuevas capturas. El caso sigue abierto y podría derivar en la desarticulación de otros grupos que, como los ‘Gancho Millos’, se reinventaron tras la caída del Bronx.