En un comunicado conjunto, 17 clínicas y hospitales de Medellín y Antioquia hicieron un llamado al Gobierno ante las millonarias deudas que tienen con estas entidades las EPS que han sido liquidadas en los últimos años.
Las entidades firmantes del documento representan más del 80% de las camas hospitalarias de mediana y alta complejidad de la región.
“La liquidación de Medimás EPS y Coomeva EPS es la crónica de una tragedia anunciada que pone en riesgo la salud de los antioqueños al dejar una deuda de más de $218.000 millones de pesos a las clínicas y hospitales de Medellín y Antioquia”, dice el comunicado.
Esta se suma a otras deudas acumuladas en los últimos años, como Saludcoop, Cafesalud y otras EPS, para un total de casi medio billón de pesos, por lo que alertaron al Gobierno Nacional, al Ministerio de Salud y Protección Social, a la Superintendencia Nacional de Salud y a los demás organismos del Estado para que garanticen la gestión del pago.
Luego de dos años de un arduo esfuerzo para hacerle frente a la pandemia por el covid-19, estas entidades de salud hicieron pública la grave situación que afrontamos por la dificultad en los pagos de los servicios que prestaron a las EPS liquidadas en los últimos años y que siguen sin cancelarse.
“Al cierre del 31 de enero de 2022, Medimás EPS nos adeuda más de $60.000 millones de pesos, sumado a los más de $158.000 millones de pesos que adeuda Coomeva EPS por su liquidación. Esta cartera tiene en promedio 500 días, es decir, refleja servicios prestados hace 500 días y que aún no han sido pagados”, dice el comunicado.
Advierten, además, que en los últimos 5 años se han liquidado más de 12 EPS, que se suman a las dos ya mencionadas, sin cumplir con sus obligaciones “dejando grandes deudas por servicios prestados, principalmente urgencias vitales y a los s sometidos a la incertidumbre”.
Los costos de la prestación de los servicios se han visto afectados en época de Pandemia en virtud del colapso de los servicios de urgencias, hospitalización y cuidado crítico, la contratación de talento humano en salud, las estrategias de expansión de servicios y ampliación de camas, la adquisición de equipos médicos y elementos de protección personal, los desabastecimientos y sobrecostos de insumos, entre otros.
“dejando grandes deudas por servicios prestados, principalmente urgencias vitales y a los s sometidos a la incertidumbre”.
Voces de los afectados
El doctor Antonio Lopera, jefe de la división médica del hospital Pablo Tobón Uribe, indicó que la transferencia de pacientes de EPS liquidas no es igual a una transferencia bancaria.
“La mayor carga de enfermedad del sistema está por las enfermedades crónicas, por lo tanto la continuidad del tratamiento es muy importante, al igual para las enfermedades tiempo sensibles, como el cáncer o los trasplantes, que ameritan una adecuada coordinación del cuidado”, expresó el galeno.
Lopera indicó que, si bien las instituciones están comprometidas con la atención de los pacientes, no encuentran la misma simetría en las responsabilidades para el pago de esas atenciones.
Con los niveles de insolvencia a los que les permiten llegar no hay recursos suficientes para pagar las acreencias por los servicios prestados
Por su parte, el doctor Andrés Trujillo, director general de la Clínica CES, expresó que estos procesos liquidatorios de las EPS están poniendo en riesgo a las clínicas y hospitales del país.
“Con los niveles de insolvencia a los que les permiten llegar no hay recursos suficientes para pagar las acreencias por los servicios prestados a los pacientes y están descargando sobre las clínicas y hospitales la responsabilidad del derecho a la salud, lo cual hacemos con responsabilidad, pero sin recursos es imposible”, manifestó el doctor Trujillo, quien hizo un llamado para evitar que las EPS lleguen a ese estado de insolvencia.
Finalmente, el doctor Mauricio Tamayo director del hospital San Vicente Fundación, aseveró que la situación por la que están atravesando los hospitales y clínicas es muy grave por esta situación.
“Para que se hagan una idea, con corte al 31 de diciembre del 2021 la cartera de estas 17 clínicas ascendía a $1,7 billones de los cuales, poco más de 400.000 estaba representado en EPS liquidadas, pero con la situación de Coomeva y Medimás, esta ascendió a casi medio billón de pesos”, expresó Tamayo.
Por el llamado a las autoridades es que el pago de esas acreencias se haga en debida forma, ya que los repagos por las anteriores EPS liquidadas han sido mínimos.
De no hacerse, se pondría en grave riesgo la situación y permanencia de estas clínicas y hospitales.
MEDELLÍN