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Sincelejo, venían operando 4.000 tenderos, pero a raíz de la pandemia por el covid-19, unido a alto número de supertiendas que operan desde los barrios, las amenazas y atracos, han llevado a la
quiebra al 50 por ciento de estos servicios.
Así lo manifestó Karina Mon, directora de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) en Sucre, quien ve con preocupación la situación que enfrentan los propietarios de estos establecimientos.
No alcanzan a tener el mismo nivel de ventas que tenían proyectado
Sin embargo, reconoce que en otro sector del comercio han generado una recuperación económica, en especial los ubicados en los grandes centros comerciales y otros como los bares y restaurantes.
“Al mes de junio es donde se han visto esos visos de mejoría en los centros comerciales, lo que no se visualiza en las tiendas de barrios, porque no alcanzan a tener el mismo nivel de ventas que tenían proyectado para el comienzo de la reactivación”, explica.
Señala que, como si fuera poco, en los mismos sectores donde venían operando desde hace muchos años las tiendas, aparecieron las llamadas supertiendas con grandes capitales inclusive del extranjero y de otras regiones del país.
“Para los tenderos, la competencia de las cadenas de descuento duro, que son los que han llegado a los barrios, ha hecho que este formato tradicional tenga que reinventarse con estrategias de ventas”, dijo.
En estos momentos estamos implementando un proyecto exclusivo para mujeres, denominado Mujeres más Productivas
Agrega que, a través de Fenalco y la agremiación de tenderos, se han preocupado por iniciar una serie de capacitaciones y mejorar todo lo relacionado con el tiempo de estos trabajadores.
“En estos momentos estamos implementando un proyecto exclusivo para mujeres, denominado Mujeres más Productivas, relacionado con capacitaciones y beneficios para más de 450 tenderas de barrios”, manifestó.
Anota que se trata de un proyecto donde interviene Fenalco, el sector privado y público buscando que las mujeres puedan acceder a negocios más productivos, con orientación hacia el largo plazo.
“Muchas de las tiendas comenzaron a orientarse hacia el formato del autoservicio a raíz de las mismas exigencias del consumidor y también al servicio del domicilio, lo que ha comenzado a dar buenos resultados en especial en estos tiempos de pandemia”.
Cuenta la directora de Fenalco que las personas han optado por comprar en las supertiendas de los barrios, en el llamado mercado duro porque, además de encontrar productos de muy buena calidad, los precios que ofrecen son bajos.
“El consumidor aprovecha esta situación, porque el poder adquisitivo de ellos bajó al quedar muchos sin trabajo”, afirma.
Precisa que los tenderos ahora también cierran sus negocios más temprano por la inseguridad que se ha generado en la ciudad, donde muchos han denunciado las extorsiones a las que se ven sometidos y en otros casos a los constantes atracos.
“Tratamos de trabajar de la mano con las autoridades para que el tendero tenga la oportunidad de denunciar cualquier anomalía y estos puedan intervenir”.
Por su parte, los tenderos dicen que en estos momentos necesitarían de un gran apoyo por parte de los gobiernos de turno para seguir subsistiendo, de lo contrario están abocados a desaparecer.
Francisco Javier Barrios
Especial para EL TIEMPO
Sincelejo
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