Durante los últimos días, los medios de comunicación han revelado distintas noticias sobre el aumento de precio que han sufrido algunos productos de la canasta familiar como la papa, los huevos, el pollo y el pan, a lo que se une el famoso “corrientazo” que también se ha visto afectado con el incremento. Y es que los impactos que causan la inflación no solo se reflejan en los productos del mercado, también llegan hasta los servicios públicos domiciliarios.
Dentro de las conversaciones cotidianas, se escucha con frecuencia que los servicios públicos hoy en día son más costosos, y esto, aunque es cierto, tiene también sus raíces en la inflación y otros aspectos macroeconómicos que aquí le explicarán.
Así funcionan los servicios públicos
Para empezar, se debe tener en cuenta que las tarifas de los servicios públicos son reguladas, es decir, las empresas prestadoras de energía, gas, acueducto, alcantarillado y recolección de basuras, están vigiladas por dos entidades gubernamentales que son quienes velan por los derechos de los consumidores. Para el caso de energía y gas, está la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) y, para el caso de acueducto, alcantarillado y aseo, es la Comisión de Regulación de Agua potable y saneamiento (CRA). Ambas entidades, además de cuidar el cumplimiento regulatorio de los servicios públicos, les entregan a las empresas las fórmulas tarifarias con las cuales se calculan los precios que finalmente se le cobran al consumidor.
La tarifa final que el cliente ve en su factura resulta de un cálculo que hacen las compañías con la fórmula que proporcionan ambos entes reguladores. En ella explican los aspectos que deben tener en cuenta las entidades para que sean sostenibles y se recuperen los costos asociados a la prestación del servicio. Para realizar los cálculos, las comisiones de regulación usan en la fórmula, entre otros, aspectos macroeconómicos tales como el índice de Precios al Consumidor (IPC) , la TRM (precio del dólar respecto al peso colombiano), el índice de Precios del Productor (IPP), precios de los combustibles, hidrología a nivel nacional, demanda del servicio, entre otras.
Por ejemplo, para el servicio de acueducto y alcantarillado, según la fórmula tarifaria definida por la CRA, cada vez que el IPC se acumula en un 3 por ciento o superior, desde la última actualización, las tarifas de estos dos servicios se deben indexar, por lo que queda a expensas de lo que suceda con el costo de vida, permitiendo a las empresas ser sostenibles y costo-eficientes, (en el mes de agosto de 2022, la variación anual del IPC fue 10,84 por ciento). Por su parte, la tarifa de gas natural está fundamentalmente influenciada por lo que suceda con la TRM, la cual ha tenido variaciones durante todo el año hasta subir a los $4466. Igual pasa con la energía, en donde algunos componentes de la fórmula utilizan como indexador, entre otros, a la variable IPP (oferta interna) que también ha tenido un incremento significativo
A manera de conclusión
Así las cosas, y con la situación actual de la pandemia generada por el covid-19, las fluctuaciones de la economía en Estados Unidos y la guerra entre Ucrania y Rusia, es posible que no solo usted vea alzas en su mercado, sino también en sus distintos servicios públicos, por lo que la única vía que queda como consumidor es hacer un uso eficiente de la energía, el gas y el agua.