Mia Wasikowska habla de su fuerte personaje en la cinta ‘Club Cero’

Un instituto educativo de élite, alumnos “complicados” y padres ausentes. En ese contexto aparece la señora Maude Novak, que se suma como profesora de “nutrición y alimentación consciente”. Cada uno de los jóvenes que decide hacer parte de la clase lo hace por diferentes razones y convicciones: algunos buscan reducir su huella de carbono; otros, mejorar su condición física, y varios buscan obtener créditos adicionales.

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Las primeras clases se centran en prácticas que están de moda hoy en día, como el consumo o alimentación consciente y el ayuno intermitente, aparentemente inofensivas. Pero a medida que las clases van pasando, todo empieza a tornarse oscuro, extremo y peligroso.

Algunos de los alumnos, por diferentes circunstancias, confían ciegamente en la profesora, que los alienta a dejar de comer, y la siguen de una manera obsesiva, cayendo en un arriesgado culto. Esta es la temática de la película Club Cero, protagonizada por Wasikowska (Alicia en el país de las maravillas), que ahonda en el peligro de los extremos y en la fragilidad de la mente adolescente.

La influencia de la señorita Novak arrastra a varios alumnos, y algunos padres y la directora comienzan a preocuparse por la mala salud de los jóvenes, y a dudar acerca de las motivaciones de la profesora. La película, dirigida por Jessica Hausner (Lovely Rita, Amour Fou), se estrenó en el Festival de Cannes 2023 y llega a los cines de Colombia el 13 de junio. Hablamos con Wasikowska, la protagonista:

¿Qué pensó la primera vez que leyó el guion?
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Confieso que de verdad me perturbó. Fue duro explorar cómo se pueden aprovechar de los adolescentes y de su vulnerabilidad. La manera en la que pueden ser corrompidos con tanta facilidad. Y también me conmovió, porque es un retrato de ellos en su mejor momento, siendo absolutamente abiertos, en un lugar supuestamente seguro, queriendo hacer el bien, estando confundidos, teniendo miedo. El hecho de que alguien pueda aprovecharse de eso y de ellos me resultó, sin lugar a duda, perturbador.

Y, sobre todo, porque ser adolescente hoy es quizás más difícil que antes...
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Sí. Es superduro. Yo, que solo estoy quince años delante de los adolescentes de ahora, creo que ellos tienen muchos más obstáculos de los que yo tuve. Todo era bastante estresante sin las redes sociales, no me puedo imaginar lo que es hoy. Ir a la escuela, volver a casa y meterse en el computador o en el celular para estar todo el tiempo en línea. Simplemente no hay espacio para apagarse y detenerse. Además, nunca pueden desconectarse, siempre hay alguien o algo diciéndoles qué deberían estar haciendo o cómo deberían estar haciéndolo. Yo realmente lo siento mucho por los adolescentes de hoy en día...

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Muchos padres creen que hacen lo mejor para sus hijos, pero a veces se equivocan. ¿Cómo se siente con lo que pasa en la cinta, que padres que quieren lo mejor para sus hijos consigan lo contrario?
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Es muy difícil. De hecho, creo que mi personaje, la señora Novak, logra llegar a ellos y manipularlos porque puede darles algo que sus padres no pueden. Y eso es superpeligroso y aterrador. Y, por otro lado, estos padres están convencidos de que están haciendo todo bien, que están mandando a sus hijos a la mejor escuela, y no. Así que supongo que, hagas lo que hagas como padre, siempre hay amenazas y peligros.

¿Qué le diría a la señora Novak, su personaje, si pudiera hablar con ella?
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¡Dios, no tengo idea! Realmente no lo sé, pero lo que sí siento es que cualquiera que realmente crea que conoce la verdad absoluta, está equivocado. Si alguien me dice que tiene todo claro, yo huyo. Creo que realmente necesitamos reconocer que, en realidad, nadie sabe lo que está pasando y no siempre hay mucho que hacer al respecto. Estoy convencida de que si alguien está realmente seguro de que está viviendo de la manera correcta, está equivocado.

Mucha gente, así se equivoque, tiene buenas intenciones... pero esas buenas intenciones no alcanzan y a veces generan situaciones peores...
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Sí. Y eso fue algo que me gustó mucho de la manera en la que Jessica, la directora, me pidió que encarara el personaje. Cuando leí el guion lo primero que pensé fue que la señora Novak debía saber que los estaba manipulando, que estaba abusando de su poder y que, simplemente, era una sociópata. Pero Jessica insistió muchísimo en que la interpretaran como una verdadera creyente, como si ella realmente creyera que ese era el camino correcto para seguir. Y en ese sentido, es casi más peligroso.

¿Por qué?
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Porque ella está muy segura de lo que está haciendo. Porque lo que ella pregona es una verdad para ella. Y creo que el mundo está lleno de verdades a medias. Además, siempre pienso que cualquier cosa llevada al extremo es mala. No recuerdo quién dijo eso, pero creo que es verdad. Cualquier cosa que uno lleve al extremo, a un 100 por ciento, es un peligro.

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Hoy, todo el mundo habla del problema de la obesidad, del aumento de peso. Y esta película trata exactamente de lo contrario...
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Sí. Y, nuevamente, creo que pensar que una cosa funciona para todos es absurdo. Cada persona tiene necesidades diferentes. Y creo que no existe una única forma de comer que funcione para todos. No existe una única manera de vivir que funcione para todos. Se trata de abrazar la diversidad y de que todos hagan lo que les sirva, o alentar a las personas a hacer lo que es bueno para ellos, incluso si es diferente de lo que es bueno para ti.

¿Cómo fue para usted terminar la película? ¿Pudo desligarse de ella fácilmente o le costó?
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La verdad, estaba muy feliz de que ya hubiera terminado. Fue un rodaje duro. Grabar una película, cualquier toma, siempre es difícil. Y luego, con un tema con este, todo se hace más pesado. Estaba muy, muy feliz de dejarla ir. Y no lo sé, siento que todos esos problemas dan vueltas alrededor de la vida de todos modos. Y a veces es interesante sumergirse en ellos y explorarlos. Pero intento nunca llevarme los personajes a casa... y fui muy feliz de dejar ir a la señora Novak.

¿Quiénes cree usted que deberían ver la película?
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Honestamente, todo el mundo. Y espero que le recuerde a la gente la sensibilidad de los adolescentes. Y que cada persona que la vea observe sus propios prejuicios y no intente imponerle nada a los demás.

¿Cuál fue el mayor desafío al interpretar a la señora Novak?
Filmar con Jessica fue todo un desafío. Ella sabe lo que quiere y lo que necesita el rol, y uno siente la responsabilidad de hacer que las cosas sean como ella las ha visualizado. Ella es extremadamente específica. Entonces, hay que aceptar que simplemente haces lo que el director quiere. Y eso siempre es un desafío. Pero fue genial. Y fue un gran aprendizaje.

AUTOR: ÚRSULA LEVY 
Para EL TIEMPO 
@Uschilevy