Senderistas encontraron un tesoro oculto en la montaña, el botín podría ser de 1921

Dos excursionistas que recorrían los montes Krkonoše, en el noreste de la República Checa, encontraron por casualidad un tesoro oculto compuesto por 598 monedas de oro, joyas y otros objetos valiosos. 

El hallazgo, ocurrido en febrero y revelado recientemente por el Museo de Bohemia Oriental, ha generado gran interés entre expertos y la comunidad local, debido a su misterioso origen y su notable valor histórico y económico.

Según informó 'CNN', los excursionistas, que prefieren mantener el anonimato, se desviaron del camino habitual y, al atravesar una zona boscosa, notaron una caja de aluminio sobresaliendo de una pared rocosa. 

Al abrirla, descubrieron un conjunto de objetos que incluía 10 brazaletes de oro, 17 estuches para cigarros, una polvera, un peine, una cadena con una llave y las mencionadas monedas, que en total pesan 3,7 kilogramos (equivalentes a 8,16 libras). El valor estimado del oro, únicamente por su contenido metálico, ronda los 8 millones de coronas checas, unos 360.000 dólares.

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Tras el descubrimiento, los caminantes entregaron el contenido al Museo de Bohemia Oriental, en la ciudad de Hradec Králové. “Los descubridores llegaron al museo sin cita previa y se dirigieron directamente al numismático”, indicó Miroslav Novak, jefe del departamento de arqueología del museo, en declaraciones por correo electrónico a 'CNN'. Solo entonces comenzaron las investigaciones arqueológicas en el sitio del hallazgo.

Aunque aún no se ha determinado con certeza el origen del tesoro, los expertos han descartado que tenga más de un siglo de antigüedad, dado que la moneda más reciente está fechada en 1921. 

Esto ha llevado a los investigadores a vincular el hallazgo con dos períodos turbulentos de la historia regional: el éxodo de checos y judíos antes de la Segunda Guerra Mundial y la retirada de los alemanes en 1945, según sugirió Novak a 'CNN'.

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Sin embargo, la profesora Mary Heimann, especialista en historia de Checoslovaquia en la Universidad de Cardiff, señaló a 'CNN' que, si el tesoro hubiera sido enterrado en 1945, sería lógico encontrar monedas más recientes. 

Para ella, el hecho de que la moneda más nueva sea de 1921, año marcado por una crisis económica en Checoslovaquia y el fin de la guerra soviético-polaca, podría indicar que el tesoro fue ocultado en ese periodo de inestabilidad.

Una característica que ha desconcertado a los expertos es la ausencia total de monedas locales. De acuerdo con Novak, aproximadamente la mitad de las monedas son de origen balcánico y la otra mitad sas. No hay monedas centroeuropeas, como alemanas o checoslovacas, lo cual es inusual para la región. 

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Vojtěch Brádle, numismático del museo, explicó que algunas monedas presentan contramarcas de la antigua Yugoslavia, lo que sugiere que pasaron por la península balcánica tras la Primera Guerra Mundial.

El hallazgo ha desatado una ola de especulaciones en la comunidad local. Novak afirmó a 'CNN' que han recibido numerosas llamadas con rumores que podrían ayudar a esclarecer el origen del tesoro. 

Una teoría apunta a la familia noble Swéerts-Špork, antiguos propietarios del complejo barroco de Kuks, mientras que otra lo vincula con posibles botines de guerra de los legionarios checoslovacos.

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El análisis del contenido continúa. Dos de los estuches para cigarros permanecen sellados y se desconoce la composición exacta de los metales de varias piezas. Una vez completado el estudio, el tesoro será preservado e incorporado a la colección numismática del museo. Está prevista una exposición temporal en otoño.

Según la legislación checa, los hallazgos arqueológicos pertenecen a la istración regional desde el momento de su descubrimiento. No obstante, los descubridores tienen derecho a una recompensa económica basada en el valor material o histórico de los objetos, confirmó Novak.

SOFÍA ARIAS MARTÍNEZ

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL

EL TIEMPO