A los problemas de contaminación ambiental por los que la Corte Constitucional condenó a la mina Cerro Matoso, en Córdoba, se suman los líos fiscales por no pagar todas las regalías.
La Contraloría General detectó que desde 1998 esta mina debe 170.000 millones de pesos al Estado colombiano, por regalías dejadas de girar.
Así se lo certificó la Contraloría a la Agencia Nacional de Minería, quien encontró que ese dinero no lo pagó entre 1998 y 2003, y entre 2007 y 2012.
Esas regalías debían ser giradas por Cerro Matoso por los contratos de concesión 866 de 1963 y 1727 de 1991 por la mina de ferroníquel que opera en Córdoba, la cuarta más grande del mundo.
De uno de los contratos debe 48.259 milllones de pesos. Y del contrato 866 de 1963 debe otros 120.728 millones de pesos, sin incluir intereses. También, del contrato 1727 de 1971 debe 4.378 millones de pesos.
Esta deuda se tiene porque la empresa aplicó costos y gastos deducibles que no correspondían a los establecidos en los contratos para el cálculo de las regalías, con lo que terminó pagándole al Estado un valor menor por su operación en la mina de Córdoba.
Ante estos incumplimientos, la Agencia Nacional de Minería profirió una resolución en la que declara que Cerro Matoso tiene obligaciones económicas por aplicar de forma errónea los costos que le ayudaron a disminuir el valor real de las regalías que paga al Estado.
"Si bien la Agencia Nacional Minera, dentro de las conclusiones, advierte, entre otras situaciones, que el menor valor pagado se debió la aplicación defectuosa de los costos deducibles en la determinación y pago de las regalías correspondientes a la explotación de Níquel en los contratos 866 de 1993 y 1727 de 1971, para este órgano de control existe fundada incertidumbre en la efectividad del recaudo", dice la Contraloría.
Esa preocupación, dice la Contraloría, se da porque las obligaciones que mantiene Cerro Matoso son de hace mucho tiempo en el que no se ha hecho ninguna gestión para lograr cobrar la regalías que debe.
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