Lo secuestraron en EE. UU. y lo obligaron a hacer algo inaudito en un puente vehicular

Un hombre oriundo de Oklahoma, al sur de Estados Unidos, fue secuestrado por un grupo de delincuentes que lo obligó a saltar desde un puente vehicular hacia el tráfico atado de pies y manos con cinta adhesiva, por lo que resultó gravemente herido y debió ser hospitalizado.

Escenas que parecen parte de una película de acción fueron captadas por testigos en el estado sureño de Oklahoma durante la última semana cuando un hombre se vio obligado a saltar de un puente vehicular hacia el tráfico, amenazado de muerte por sus captores.

La conmoción perdura entre los habitantes del condado de Okmulgee, en donde la Oficina del Sheriff recibió un llamado de alerta desde un área cercana al puente del río Deep Fork el jueves pasado por parte de un testigo que observó "a alguien saltando al tráfico", según expresó en un comunicado compartido en sus redes sociales.

"Los agentes llegaron y localizaron a un sujeto masculino que resultó gravemente herido y requirió atención médica inmediata", indicaron los agentes de policía, quienes determinaron a partir de una investigación exhaustiva que "la víctima en este caso había sido secuestrada y obligada a abandonar el puente después de haber sido atada con cinta adhesiva".

Tras hablar con varios testigos de la escena y personas allegadas a la víctima, las autoridades lograron detener a tres sospechosos, identificados como Sean Lunney, de 31 años, Brianna Nohmer, de 18 años, y Jaysen Lawson, de 21. Las últimas dos detenidas portaban un arma de fuego que habría sido utilizada en el secuestro.

Al obtener el testimonio de una persona importante en el caso, los investigadores elaboraron una teoría en la que Lawson, su hermano y Lunney habrían secuestrado al hombre y posteriormente lo trasladaron a un río para matarlo. Aparentemente, Lunney lo apuntó con un arma y lo obligó a saltar, pero al sobrevivir, fue trasladado a otra sección del puente, en donde le tapó la boca y ató sus manos y pies para que saltara nuevamente, mientras Lawson actuaba como vigía.

Las tres personas detenidas por el inusitado caso de secuestro fallido fueron acusadas de secuestro, en tanto Lunney también fue acusado de agresión con agravantes y lesiones y de un delito grave por posesión de armas de fuego. Asimismo, Lunney y Nohmer se encuentran detenidos con una fianza de US$250.000 cada uno.

En ese sentido, Nohmer afronta un cargo adicional de asalto con intención de asesinar, mientras que Lawson, con una fianza de US$300.000, fue acusado también de asalto y agresión con un arma letal, intento de asesinato en primer grado y conspiración para cometer un delito grave.