Congreso hunde la equidad de género en la política

La disposición hacía parte de la reforma política, que fue archivada por Cámara de Representantes.

Todos los años, la empresa Aequales, el Colegio de Estudios Superiores de istración y la Secretaría de la Mujer de Bogotá realizan el ránking PAR, que pretende evaluar cómo es la equidad de género en las empresas del país. Este año participaron 348 organizaciones en total: 265 privadas, 69 públicas y 14 pymes. Foto: iStock

04.11.2020 23:02 Actualizado: 05.11.2020 00:57

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El sueño de que el Senado y la Cámara de Representantes estuviesen compuestos por igual número de hombres y mujeres se vio frustrado en la noche de este miércoles por el Congreso de la República.

En un debate que se extendió por cerca de cuatro horas, la plenaria de la Cámara hundió el proyecto de reforma política que hacía trámite en el Congreso, el cual contenía temas claves para la renovación de la política y financiación de las campañas, además de un tema que generaba una renovación en el sistema colombiano: la paridad de género.

La aprobación de la paridad de género en la conformación de las listas era considerado todo un hito para la democracia colombiana.

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La idea era que la plancha que presentaran los partidos para la elección de concejos, asambleas y Congreso de la República estuviera conformada por hombres y mujeres de manera intercalada. Es decir, que si en el primer renglón había una mujer, en el segundo debía haber un hombre y en el siguiente una mujer.

Esto implicaba que, al menos en cuanto a las candidaturas, habría igualdad en el número de hombres y mujeres en las listas.

Según una comunicación dada a conocer por la Secretaría Distrital de la Mujer, la representación de las mujeres en las diferentes instancias de los gobiernos es “importante, relevante y necesaria", pues "marca una diferencia". "Se ha comprobado que cuando las mujeres se encuentran en los espacios de decisión política o cuando hay paridad, se promueven políticas públicas, leyes y cambios que impactan de manera favorable en la sociedad”.

En contados minutos, la clase política tradicional de la @CamaraColombia hundirá nuestra #ReformaPolítica. Les da pánico la #ParidadYa entre 👩🏻‍🦱y🧔🏾. Menos eliminar el voto preferente, fuente de tanto vicio.#NoQuierenReformarse pic.twitter.com/zK7V0rNc8O
— José Daniel López (@lopezjosedaniel) November 5, 2020

En Colombia, las mujeres apenas representan el 18 por ciento en la Cámara de Representantes y apenas el 21 por ciento en el Senado de la República. El panorama también es crítico en cuanto a las candidaturas. En las pasadas elecciones regionales, las candidaturas a gobernaciones solo tenían 21 mujeres aspirantes, en contraste a 155 candidatos hombres.

Pero uno de los panoramas que más preocupa es el hecho de que en departamentos como Cesar, La Guajira, Guainía, Vichada, Amazonas, Arauca, Risaralda, Guaviare y San Andrés y Providencia, no hay ninguna mujer en las alcaldías municipales; regiones donde, además, se presentan altos índices de violencia contra mujeres y niñas.

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Es decir que en dichos departamentos, las políticas públicas en tema de género son decididas en su totalidad por hombres, lo que preocupa, pues en dichas decisiones faltaría la mitad del país, que son las mujeres.

No obstante, con la decisión tomada por la Plenaria de la Cámara en la noche de este miércoles, la poca participación de la mujer en la política continuará por lo menos durante los próximos años.

"Sino logramos la Paridad a través de este proyecto de Reforma Política, las Mujeres tendríamos que esperar: 20 años en el Senado, 16 años en la Cámara de Representantes, 152 años en las Asambleas y 124 años en los Concejos, para alcanzar una participación política de un 50%". pic.twitter.com/1RwqAHg582
— Adriana Magali Matiz 🇨🇴 (@AdrianaMatizTol) November 5, 2020

Otros temas claves de la reforma política

Financiación estatal: Actualmente, los aspirantes deben recurrir a recursos privados para financiar sus campañas, lo que en algunas ocasiones incentiva la corrupción. La idea era que el recurso para financiar las campañas fueran públicos, con lo cual habría también mayor control.

Listas cerradas: este mecanismos consiste en que los ciudadanos votan por partidos y no por personas a la hora de marcar los tarjetones para elegir corporaciones públicas (Congreso, asambleas y concejos). En la medida en la que un partido va obteniendo más votos se eligen más personas de la lista o plancha que haya presentado esa colectividad.

Actualmente la mayoría de partidos y movimientos políticos llega a las elecciones con listas abiertas. Cada candidato tiene su propio número y hace campaña por separado, por lo que el modelo ha sido cuestionado, pues la falta de filtros de financiación ha permitido que aspirantes gasten grandes cantidades de dinero e incluso hayan obtenido financiación ilegal.

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